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La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha recibido este lunes un sobre con una navaja ensangrentada, en otro intento por amedrentar a los miembros del Gobierno de España. Además del arma, el sobre contenía un CD para evitar que el escáner detectara la navaja y "un montón de folios grapados de fotocopias ampliadas de mensajes de Whatsapp y Twitter"; también otro folio manuscrito en el que habría escritas "palabras y frases sueltas", según informaron fuentes del Ministerio de Industria.
La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra lo ha confirmado en un mitin que celebraba en Ferraz. “A todo delito de odio le precede un discurso del odio y me acaban de informar que Reyes Maroto acaba de recibir una navaja ensangrentada como amenaza”, ha dicho Lastra durante un acto electoral del PSOE celebrado este lunes en la sede de Ferraz.
Horas después el autor de la amenaza ha sido identificado. No ha resultado difícil al llevar el remitente en la misma carta. Se trata de un hombre que padece esquizofrenia y que selló el envío en El Escorial.
Reyes Maroto, por su parte, ha reivindicado la democracia contra los intentos por acallarla con estos métodos.
Una nueva amenaza llega otra integrante del Gobierno de España después de los sobres con balas que recibieron la semana pasada el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, el candidato de UP, Pablo Iglesiassobres con balas que recibieron la semana pasada el ministro del Interior, Fernando Grande-MarlaskaPablo Iglesias, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez.
El líder de UP ha expresado su solidaridad con Reyes Maroto desde su cuenta en Twitter.
Tras este incidente el Ministerio del Interior ha acordado reforzar las medidas de protección para el ministro Fernando Grande-Marlaska; el candidato de Unidas Podemos a la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias, y la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, tras las amenazas de muerte recibidas la pasada semana.
Sin embargo, ahora es la ministra de Turismo que se prevé que pase a formar parte del Ejecutivo de Ángel Gabilondo en caso de que este gane las elecciones de Madrid, del 4M.
En la carta enviada a Marlaska lo instaban a dejar el cargo: "Tienes diez días para dimitir. El tiempo de reírte de nosotros se terminó. Policía Nacional. Guardia Civil. El tiempo lo tienes en contra para los taponazos".
Al líder de UP lo acusaban de la muerte de los mayores en las residencias durante la pandemia de covid, mientras amenazaban de muerte a su familia. "Pablo Iglesias Turrión. Has dejado morir a nuestros padres y abuelos. Tu mujer, tus padres y tu estáis sentenciados a la pena capital. Tu tiempo se agota", decía asimismo la misiva dirigida al exvicepresidente del Gobierno.
En una comparecencia ante el Congreso y tras presentar la pertinente denuncia en la comisaría, la ministra ha reconocido que sintió "miedo", pero ha advertido que no se dejará amedrentar. "No nos van a callar" ha dicho. "Recibir una navaja no os podéis imaginar lo duro que es. Nos sobrecogemos todos", ha reconocido, para explicar que lo primero que hizo fue llamar al colegio de su hijo para decirle que estaba bien.
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha denunciado este lunes ante la Policía Nacional la carta de amenaza que ha recibido con una navaja dentro, y ha avisado de que este hecho demuestra que "todos los demócratas" están "amenazados de muerte" si no frenan a Vox en las urnas. Así lo ha asegurado en declaraciones a los medios de comunicación tras presentar la denuncia en la comisaría del Congreso, tras confesar que siente "miedo" por la amenaza que ha recibido, y asegurar que esto "pone de manifiesto que el odio se está convirtiendo en hechos".
"Esto significa que van en serio, que nadie se está inventando nada, que personas como yo, que somos personas sencillas, que hablamos siempre de hacer las cosas por el bien común, reciban esta carta, es para preocuparse. No soy una persona polémica que haya estado en el foco de la polémica, como pueden estar otros compañeros", ha apostillado. Así, ha avisado de que esto demuestra que "cualquiera podría estar amenazado". "Podemos estar comprando y que alguien pueda atentar contra nuestra vida. Tenemos que dejar la crispación. Esto va en serio. Hay mucha gente más amenazada y no nos van a callar", ha asegurado.
A este respecto, ha defendido que ahora tiene más ganas si cabe de trabajar para hacer de Madrid, de España y del mundo un lugar mejor. "Hay que defender la democracia, y si eso significa que en las urnas hay que parar a la ultraderecha, hay que ir. Basta ya", ha reclamado.