El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, ha denunciado el "mezquino" intento del Gobierno central de "manipular el censo" para que "cualquier persona" que haya vivido un tiempo en Euskadi, y no sólo los amenazados por ETA, pueda votar en las elecciones vascas, a pesar de residir en otra comunidad autónoma.
Urkullu ha participado este sábado en Vitoria en un acto del PNV, en el que ha vuelto a criticar los planes del Ministerio del Interior para que las personas que abandonaron Euskadi por la amenaza terrorista puedan participar en las elecciones vascas.
El líder del PNV se ha referido a la ponencia sobre este tema encargada por el Ministerio a un grupo de expertos, que abre la puerta a que todas las personas que abandonaron el País Vasco, y no sólo las que lo hicieron por la presión de ETA, puedan participar en los comicios de la comunidad autónoma, a pesar de residir en otras zonas del Estado español.
"Ya no se trata ni siquiera de las víctimas; ya se trata de cualquier persona que alguna vez haya vivido en Euskadi", ha denunciado. El presidente del PNV ha criticado que "so pretexto de resarcir y reparar las consecuencias de la persecución del terrorismo", el Ejecutivo central esté tratando de "modificar las leyes electorales para adulterar el censo".
"RÉDITO POLÍTICO"
Urkullu ha afirmado que lo que se pretende es dar opción al voto en Euskadi "a no se sabe quiénes, ni cuántos ciudadanos" residentes en otras autonomías, algo que supone "manipular el censo y retorcer las leyes". En esta línea, ha advertido de que tratar de "modificar las reglas de juego arbitrariamente para alcanzar un determinado rédito político, es una mezquindad".
El dirigente 'jeltzale' ha avisado a quien "esté tentado de buscar un fraude" de este tipo, de que el PNV "traza una línea roja" en esta materia, puesto que "el futuro de Euskadi pasa por el respeto a la pluralidad de la sociedad vasca, a su voluntad soberana, a la decisión libre y sin adulteraciones de su ciudadanía".
Urkullu ha reclamado que no se "manipule" a las víctimas, a las que ha expresado su "respeto". Tras afirmar que permanecerá "atento" a este asunto, ha considerado que si lo que se pretende es la reparación del sufrimiento de los damnificados, habrá que "sumar voluntades" en los foros existentes en el Parlamento vasco para abordar estas cuestiones.
"TRIENIO NEGRO"
En referencia a la ausencia de la izquierda abertzale en la Cámara vasca actual por la ilegalización de las marcas con las que trató de concurrir a las últimas elecciones autonómicas, ha recordado que "ya se cambiaron las reglas de juego recientemente", de forma que el Parlamento "quedó achicado" al quedar fuera del mismo "una parte de la sociología política del país".
Además, ha destacado que el pacto entre el PSE-EE y el PP --recientemente roto-- "desplazó del Gobierno" autonómico al PNV, que fue el partido más votado en los comicios autonómicos. En opinión de Urkullu, los tres años y medio transcurridos desde entonces han supuesto "una marcha atrás, un cambio a peor y un trienio negro para Euskadi".