El ejercicio tiene muchos beneficios para la salud, también para los enfermos de cáncer
Los beneficios del ejercicio físico se transmiten de padres a hijos y llegan a los nietos
MadridEl cáncer sigue siendo una enfermedad que asusta tener, un diagnóstico que provoca muchos temores, pero del que por suerte cada vez existen más investigaciones que ayudan a plantarle cara. En ocasiones con tratamientos novedosos que evitan la evolución de la enfermedad, en otras con pequeños cambios que hacen que el tratamiento habitual sea más sencillo de sobrellevar.
En cualquier caso, quien recibe el diagnóstico es consciente de que lo importante es ponerse en las mejores manos, recibir el mejor tratamiento posible y hacer todo lo que esté en su mano para conseguir que sea más efectivo, normalmente cambiando ciertos hábitos que no son demasiado saludables por otros que lo son un poco más.
En esa lista no puede faltar el ejercicio, lo que no quiere decir pasar de ser una persona sedentaria a correr maratones, sino llevar una vida más activa. Evidentemente, siempre teniendo en cuenta las posibilidades de cada paciente y siendo conscientes de que es probable que no todos los días se tengan las mismas ganas o energía.
El ejercicio como medicina contra el cáncer
Aunque nos resistamos a creerlo (porque implica un esfuerzo extra por nuestra parte) el ejercicio físico tiene grandes beneficios para la salud, también en el caso concreto de los pacientes con cáncer. Así lo afirma un reciente estudio publicado en The New England Journal of Medicine, donde se recogen los resultados de un ensayo realizado con pacientes diagnosticados de cáncer de colon.
Este estudio comparaba los resultados entre los pacientes sometidos a ejercicio reglado y los que no, llegando a la conclusión de que los primeros tenían índices más altos de supervivencia a la enfermedad a largo plazo. También sugería que el ejercicio podía ayudar a evitar que el cáncer regresara. Hallazgos que consideran que podría aplicarse a cualquier cáncer.
Aumentar la cantidad de ejercicio físico que se hace después del diagnóstico podría influir de manera positiva para reducir el riesgo de recurrencia y aumentar la supervivencia, tal y como se puede extraer de este estudio, donde se ha hecho un seguimiento a pacientes de cáncer de colon durante unos ocho años.
El 37% de las personas que hicieron ejercicio tuvieron un menor riesgo de muerte, y el 28% un menor riesgo de cáncer recurrente o de un nuevo cáncer. El estudio también concluyó que 43 personas del grupo de control desarrollaron un nuevo cáncer, mientras que en el grupo de ejercicio solo fueron 23. En el grupo de control, cinco personas volvieron a tener cáncer de colon, mientras que en el otro grupo, nadie lo tuvo.
Mientras que la comunidad científica tiene claro que el ejercicio es una ayuda esencial para mejorar la salud, todavía no tienen demasiado claro los motivos por los que aumenta la longevidad y es una gran ayuda contra el cáncer. Consideran que puede ser porque reduce la inflamación, aunque también puede ser por sus efectos sobre el microbioma o porque mejora el estrés o el metabolismo de la glucosa, entre otros beneficios. Aun así, los resultados para ellos son bastante evidentes y la recomendación es sumar la actividad física al tratamiento de las personas enfermas y también a la rutina de las personas sanas.


