Hace un año comenzó el sueño del Mundial

INFORMATIVOS TELECINCO 16/06/2011 10:43

Por primera vez en la historia, España llegaba a un mundial como gran favorita para la victoria final. Su título europeo en Austria y Suiza 2008, con Luis Aragonés, y el buen juego desplegado una vez que Del Bosque tomó el relevo, situaban a la selección a la cabeza de todos los pronósticos.

La concentración de La Roja en Potchefstroom, a donde llegaron el mismo día que se inauguraba el Mundial, se había caracterizado por el optimismo y sólo el estado físico de Andrés Iniesta preocupaba a Del Bosque. El jugador del Barça arrastraba molestias en el muslo derecho y pasó estos primeros días en Sudáfrica entre algodones.

El 16 de junio de 2010 España saltaba al césped del estadio Moses Mabhida de Durban con la total seguridad de que comenzarían el Mundial con buen pie pero nadie se fiaba de los suizos, dirigidos por Ottmar Hitzfeld.

"Mal haríamos pensando que vamos a conseguir el torneo por la gorra", aseguró Iker Casillas después del último entrenamiento en el estadio de Durban, donde Del Bosque aseguraba que afrontaba el estreno con "responsabilidad" pero "con cierta tranquilidad".

Los once elegidos

Iker Casillas; Sergio Ramos, Piqué, Puyol, Capdevila, Busquets (Torres, m.61), Xavi, Xabi Alonso, Silva (Navas, m.61), Iniesta (Pedro, m.77) y Villa, fueron los elegido de Del Bosque para el debut en Durban.

España dominó el encuentro de principio a fin pero dejó la sensación de que era un equipo al que podían haberle tomado la medida los rivales. El gran trabajo defensivo de Suiza y el desacierto en el ataque de España hicieron que se llegara al fatídico minuto 52 con empate a cero en el marcador.

Entonces llegó la desafortunada jugada y el gol de rebote de Gelson Fernandes que hizo despertar de nuevo a todos los fantasmas de la participación de España en los mundiales.

"Desgracia futbolística"

Los jugadores asumieron la derrota como una "desgracia futbolística", y lejos de hundirles la moral, sirvió para espolear al grupo y para que la unión entre ellos se hiciera aún más fuerte. Del Bosque supo administrar las críticas con la naturalidad y la tranquilidad que le caracterizan y quitó presión a los internacionales para que sólo pensaran en los dos siguientes enfrentamientos con Honduras y Chile.

El resto de la historia es conocida por todos. España se proclamó campeona del mundo 26 días después, Iniesta se convirtió en el héroe de la final con Holanda y el país entero vivió un sueño del que, un año después, no quiere despertar. BQM