¿Ayudarán los Leopard alemanes a liberar a Ucrania de la invasión?

  • La actual ofensiva ucraniana ha logrado 'liberar' más de 3.000 kilómetros cuadrados en la región de Járkov, en el este del país. Estos resultados han relanzado el debate en Alemania sobre el envío armas pesadas a Ucrania.

Cuando la ministra de Defensa de Alemania, la socialdemócrata Christine Lambrecht, hablaba este lunes sobre las cuestiones estratégicas de seguridad y defensa con las que ha de lidiar el Gobierno del canciller Olaf Scholz, había un gran “elefante en la habitación” en el Consejo Alemán de Relaciones Exteriores (DGAP, por sus siglas alemanas). A sus instalaciones había sido invitada Lambrecht para pronunciar un discurso sobre seguridad nacional.

A ese mismo “elefante en la habitación” – expresión inglesa integrada en la jerga del poder alemán – se refirió Lambrecht al poco de tomar la palabra en el acto que co-organizaba en Berlín su negociado con el DGAP. El “elefante” en cuestión son, en realidad, los tanques alemanes Leopard 2, fabricados por la empresa bávara Krauss-Maffei Wegmann (KMW). En Ucrania se piden a Berlín como apoyo frente a la ilegal invasión rusa.

Lo hacía, por ejemplo en Kiev, el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, en presencia de su homóloga germana, la política ecologista Annalena Baerbock, quien pasaba por la capital ucraniana este fin de semana. Ambos protagonizaron un encuentro en el que el “tema principal”, según Kuleba, fue la cuestión del apoyo con armas pesadas alemanas a Ucrania. Entre las armas que desean en Kiev figuran los Leopard 2.

Por Berlín pasaba la semana pasada el primer ministro de Ucrania, Denys Shmyhal. Él dejó dicho en Berlín que su país espera recibir de Alemania tanques modelo Leopard 2. “Esperamos de Estados Unidos que envíen tanques Abrams y de Alemania esperamos Leopard 2. Esos son tanques modernos que Ucrania necesita en el campo de batalla”, ha llegado a decir Shmyhal.

El reciente éxito de las fuerzas de Ucrania en su ofensiva en el este del país, donde se han llegado a liberar 3.000 kilómetros cuadrados en al región de Járkov, implica que esas peticiones de ayuda ucraniana tengan mayor peso. Porque demuestran, entre otras cosas, que Ucrania puede lograr victorias gracias a la ayuda militar de los países occidentales.

Según cuentas recientes del Ministerio de Defensa de Lambrecht, Alemania ha hecho llegar diez sistemas de artillería autorpopulsados, los Panzerhaubitze 2000 además de veinte sistemas antiaéreos Gepard, tres sistemas lanzamisiles modelo Mars II y tres vehículos de ingenieros. En la lista del material de apoyo del ministerio de Defensa alemán a Ucrania no hay Leopard 2. Y no parece que vayan a incluirse pronto.

Al menos esa era la imagen que ofrecía Lambrecht cuando aludía al “elefante en la habitación” que ocupaba la sala donde se desarrollaba el acto organizado por el DGAP.

No enviar los tanques porque Alemania correría riesgos

“Hemos acordado con nuestros aliados que Alemania no enviará por su cuenta taques de fabricación occidental”, decía Lambrecht, señalando que no saldrían del actual arsenal alemán tanques Leopard con destino Ucrania para ponerlos en manos de los soldados que se defienden de la invasión rusa. Eso supone arriesgar la seguridad Alemania, según Lambrecht.

“Soy la ministra de defensa de Alemania. He jurado un cargo y tengo una obligación. Por eso no es tan fácil decir ahora que ponemos en riesgo el no ser capaces de defender el país porque lo cedemos todo. No, eso no lo hago”, abundaba Lambrecht en sus explicaciones.

Sus palabras estaban alineadas con esa convicción del canciller Olaf Scholz según la cual enviar sistemas como los Leopard 2 a Ucrania puede suponer una escalada en el conflicto de resultados imprevisibles dado el belicoso comportamiento internacional de la Rusia de Vladimir Putin.

“Cualquiera que se ocupe y atienda a estos debates sabe que es un tema complicado. En la guerra no hay nunca soluciones fáciles y en la toma de decisiones se suele tomar la decisión que es la menos mala”, recuerda a NIUS Rafael Loss, experto en cuestiones de seguridad y defensa del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR, por sus siglas en inglés). Él es de los que piensa que el debate sobre el envío de los Leopard 2 es una oportunidad para que Europa lidere en su apoyo a Ucrania, pues hasta ahora ha sido Estados Unidos el país occidental que ha llevado la iniciativa en el apoyo internacional a Kiev.

No hay soluciones fáciles”

“El argumento de los riesgos de escalada o el de no hacer envíos de material militar a Ucrania para cumplir con la defensa de la OTAN en el flanco del este son razonables, pero tiene que tomarse una decisión política, y recuerdo que Jens Stoltenberg [secretario general de la OTAN, ndlr.] ya ha dicho que, por el momento, la batalla que están librando los ucranianos es más importante que cumplir con los requerimientos de la OTAN en lo que respecta a las reservas de material militar”, según Loss.

“Y los países bálticos y Polonia, por ejemplo, han hecho ya muchos envíos de material militar a Ucrania. Alemania es de los pocos países que rechaza mandar tanques de su reserva. Esto nos hace daño en términos de credibilidad frente a los aliados de la OTAN”, abunda este experto, que habla en un momento particularmente importante en la guerra contra el invasor ruso dados los avances ucranianos en el noreste del país agredido.

Tanto es así que la presidenta de la comisión de Defensa del Bundestag, la liberal Marie-Agnes Strack-Zimmerman, decía este lunes a la radio-televisión bávara BR que es “increíblemente importante y debe pasar de inmediato” que Ucrania reciba los carros de combate, no sólo los Leopard 2, sino también los Marder. Éstos últimos son vehículos de infantería que también pueden ser decisivos a la hora de “fundamentar” los avances de las tropas ucranianas, de acuerdo con el término que empleaba Strack-Zimmerman.

En la coalición que lidera Scholz, no sólo hay liberales como ella dispuestos a apoyar más a Ucrania. También en Los Verdes hay predisposición para hacer más por Kiev frente al agresor ruso. Precisamente en Kiev, Baerbock mostró el compromiso alemán de enviar “más armas y armas pesadas” ante su homólogo ucraniano.

Es momento de mostrar decisión”

Afirmaciones de este tipo se han topado con una opinión publica que, en Alemania, muestra claramente su deseo mayoritario de seguir apoyando a Ucrania, incluso cuando las consecuencias económicas de ese apoyo pueden resultar negativas. Un sondeo reciente publicado en la cadena pública ZDF señala que hasta el 70% de los alemanes piensa que su país debe ayudar a Ucrania pese a que eso signifique mayores precios energéticos.

Este lunes, dos grandes diarios generalistas del país, uno de línea editorial de centro-derecha como es el Frankfurter Allgemeine Zeitung y otro de centro-izquierda, como el periódico bávaro Süddeutsche Zeitung, publicaban sendos editoriales dando cuenta de la importancia para Alemania de apoyar más a Ucrania.

“Es momento de mostrar decisión”, señalaba el periódico de Fráncfort (oeste), aludiendo a las dudas que ha generado un Olaf Scholz que, pese a sus repetidos anuncios sobre el envío de armas pesadas a Ucrania, no ha llevado a su país a destacar en su activismo en favor de apoyar al país invadido se refiere. “Putin puede perder y perderá esta guerra, si todo sigue así. Alemania debe cumplir con su parte, con el envío de armas”, se leía en el periódico de Múnich.

En este contexto, Lambrecht decía este lunes 'no' a todo envío de Leopards a Ucrania. En vista de cómo se ha comportado Alemania en el pasado, ese 'no' podría pasar a ser un 'sí'.

Ahora bien, para que ocurra ese giro parece que ha de ejercerse presión sobre la Cancillería Federal. En la coalición gubernamental, ya hay ecologistas y liberales presionando. En la oposición, el principal partido de la oposición, la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU), también quiere ver Leopards alemanes en Ucrania.

Lambrecht – y Scholz – pueden acabar muy solos si deciden que Alemania se quede con sus tanques.