De los fallecidos, 31 son presos de la cárcel que murieron en un bombardeo de los rebeldes que han asediado el lugar para liberar a los encerrados. Los otros 40 son soldados y fuerzas del régimen también muertos en el ataque de los guerrilleros.
Según el Observatorio, el asedio comenzó con la explosión de dos coches bomba frente a las puertas de la prisión a principios del mes pasado.