Lo que le ha sucedido a Desiree Jenning que era la chica pompón de un equipo de fútbol rugby en Virginia, puede ocurrir en uno entre un millón de casos, según los médicos.
Jennings, que tenía un estado de salud ideal, había decidido vacunarse poco antes de participar en un maratón, siguiendo las recomendaciones de las autoridades médicas estadounidenses y diez días después apenas podía andar, ni hablar.
En un inicio los médicos pensaron que sufría lupus, sin embargo, tras someterse a un chequeo en el Hospital Johns Hopkins, le diagnosticaron una extraña
afectación neurológica que no tiene cura y que puede provocarla, una infección, un trauma cerebral o -como es este el caso- una reacción a un medicamento.
La chica sufre atonía, y su caso que, fue revelado por el Canal Fox, impactó tanto en Estados Unidos, que incluso el actor Jim Carrey le ha ofrecido su ayuda para encontrar algún tratamiento que la ayude a salir de ese estado.