Ibrahim, presidente de la organización no gubernamental Organización para el Desarrollo Social de Sudán (SUDO) fue arrestado el 7 de diciembre de 2016 por los servicios de Inteligencia del país.
La Fiscalía le acusa de participar en actividades de espionaje e Inteligencia a favor de embajadas extranjeras a cambio de dinero, afirmando que "dio además información falsa sobre el uso de armas químicas y manipuló la imagen del país".
Medios vinculados al gubernamental Partido Nacional del Congreso afirmaron hace meses que Ibrahim estaba acusado de colaborar en un informe publicado en 2016 por Amnistía Internacional (AI) en el que se acusó a Jartum de usar armas químicas en la región de Darfur.
El abogado de Ibrahim, Nabil Adib, ha indicado que los cargos fueron presentados hace tres semanas y que decidieron no apelarlos para ganar tiempo, tal y como ha recogido el diario local 'Sudan Tribune'.
El activista ya estuvo arrestado entre diciembre de 2003 y enero de 2005 en relación con su trabajo con la SUDO en Darfur, escenario de un conflicto entre el Ejército y varios grupos rebeldes.