La directora del Banco Mundial en el país, Anabela Abreu, ha explicado que este censo ilustra la importancia de la asociación que existe en Haití entre el Gobierno y sus aliados desarrollados. Los resultados estarán disponibles a finales de 2018.
Abreu ha destacado que sin el respaldo de sus socios las autoridades haitianas no serían capaces de realizar este censo, al tiempo que ha subrayado que "gracias a un esfuerzo colectivo" se ha gestionado este primer e "importante paso".
El terremoto que devastó el país en 2010 provocó el desplazamiento de muchas personas y causó una inmigración masiva, con muchas personas trasladándose desde las regiones rurales a las zonas urbanas. Estas circunstancias hicieron que el último censo registrado en 2003 quedase obsoleto.
"Por primera vez en más de una década, este censo permitirá a mucha gente saber cuántas personas viven en Haití a día de hoy, y proporcionará un mapa detallado y comprensible de la población en términos de género, edad, actividad y residencia, lo que ayudará a elaborar mejores planes y programas sociales", ha explicado Abreu.
El Banco Mundial ha destacado que este proyecto también fortalecerá las habilidades del país a la hora de analizar, divulgar y utilizar los datos de forma conjunta. Además, las autoridades han contado con la ayuda de imágenes vía satélite y han destacado que esta será la primera vez que todos los datos queden digitalizados, lo que aportará más fiabilidad y contribuirá a una difusión más rápida .