Seychelles, primer país de África en vacunar contra el virus: administra la de Sinopharm, con un 79,34 % de eficacia

  • Seychelles es el primer país de África en vacunar frente al covid

  • África superó la noche del sábado los tres millones de contagios

  • La vacuna Sinopharm tiene un 79,34 % de eficacia

Seychelles, menos de una semana después de confirmar su primera muerte por coronavirus, ha iniciado este domingo el proceso de vacunación de su población contra esta enfermedad, convirtiéndose así en el primer país de África en hacerlo.

El presidente de Seychelles, Wavel Ramkalawan, ha sido la primera persona en recibir la vacuna, desarrollada en este caso por la farmacéutica china Sinopharm, ha informado la agencia de noticias Seychelles News Agency.

Además de Ramkalawan, los siguientes en recibir las primeras dosis han sido el resto de miembros del Gobierno, así como los diputados de la Asamblea Nacional y personal médico.

Hasta el momento, Seychelles, un archipiélago situado en el Océano Índico, cuenta con 50.000 dosis de la vacuna contra la COVID-19, y espera recibir en los próximos días otras 20.000 procedentes de Emiratos Árabes Unidos.

Para finales de Enero, las autoridades del país recibirán de India otras 50.000 dosis de la vacuna contra el coronavirus, pero en esta ocasión de la farmacéutica AstraZeneca.

El Ministerio de Salud de Seychelles ha registrado hasta el momento 531 casos acumulados, de los cuales 278 corresponden a pacientes que han superado la enfermedad, así como un fallecido.

En su totalidad, África superó la noche del sábado los tres millones de contagios --el 40 % de ellos en Sudáfrica--, de los cuales más de 72.000 terminaron en fallecimientos mientras que 2,3 millones de personas se han curado, según el recuento de la Universidad John Hopkins.

La vacuna Sinopharm tiene un 79,34 % de eficacia

El pasado 31 de diciembre, China otorgó la primera autorización para la comercialización de una de las vacunas contra la covid-19 desarrolladas en el país, una de las dos candidatas de la farmacéutica estatal Sinopharm.

Sinopharm y la subsidiaria con la que desarrolla esa vacuna, el Instituto de Productos Biológicos de Pekín, solicitaron el visto bueno a la Administración Nacional de Productos Médicos (NMPA) tras informar de que su eficacia era del 79,34 %, según datos provisionales derivados de la fase 3 de ensayos clínicos.

El subdirector de la Comisión Nacional de Sanidad, Zeng Yixin, indicó que, aunque el precio de producción irá variando con arreglo a la escala en la que se vaya empleando la vacuna, se trata de un "bien público" y que, por tanto, la premisa es que en un futuro sea "suministrada de forma gratuita a la población" de China.

El pasado mes de agosto, el presidente de Sinopharm, Liu Jingzhen, había avanzado que el precio de las dos dosis necesarias no superaría los 1.000 yuanes (153 dólares; 125 euros), una cifra que, no obstante, superaba de forma significativa a las de otros posibles sueros occidentales como los de Pfizer-BioNTech o Moderna, vacunas cuya eficacia rondaría el 95 %.

Esta vacuna es diferente a las occidentales, ya que no se basa en la novedosa técnica del ARN mensajero sino en la tradicional de virus vivos o inactivados. Así, como ventaja, no necesita una conservación de 80 grados bajo cero, como sí lo necesita la de Pfizer.