Todo empezó como un mero post en Facebook en el que Benham Pottery decidió humildemente hacer alarde de sus dotes creativas con la taza que ha creado para conmemorar el ‘brexit’ de Reino Unido. Y de eso, de una mera publicación en la red social, su obra se ha convertido repentinamente en un fenómeno viral que la actualidad ha querido llevarlo hasta los rotativos del país, trascendiendo incluso sus fronteras para propagarse también a través de medios internacionales.
¿La razón de este éxito repentino? En primer lugar, que tras todo el miércoles deliberando en Downing Street sobre la suerte del brexit, finalmente, y de forma definitiva, Reino Unido se va de Europa. Londres ha aceptado el acuerdo con Bruselas y ya empieza a correr el tiempo para el abandono; un adiós ante el cual Europa queda resignada a mirar hacia adentro, buscando cómo reforzarse ante un panorama en el cual crecen los distintos intentos de fraccionarla. Basta mirar hacia la Italia de Salvini, a la Hungría de Viktor Orbán o la Polonia de Mateusz Morawiecki, sumida en una deriva autoritaria, entre otros frentes.
Pero más allá de todo ello, hay una segunda y poderosa razón por la que esta taza de edición limitada está causando furor: la analogía que establece entre el brexit y sus posibles consecuencias. Porque la taza no es completamente uniforme, sino que en ella se lee la palabra de moda gracias a que está precisamente… rota. Cada letra ha sido creada rompiendo parte de la taza, por lo que si se procede a beber en ella… probablemente acabemos empapados. Y precisamente eso, llevado a términos sociopolíticos, es lo que se teme buena parte de la población que está clamando por que se celebre un nuevo referéndum para intentar revertir la situación. Algo que, a corto-medio plazo, se prevé fuera de lo posible. No obstante, la tormenta política ya se ha traducido en un aluvión de dimisiones.