Twitter y Neda, dos símbolos enemigos de Irán

FERNANDO MORALES 22/06/2009 00:00

A veces, las revoluciones políticas están muy relacionadas con las tecnológicas, independientemente de la época en la que suceden. Las revoluciones burguesas del siglo XIX iban de la mano de los cambios en los procesos de trabajo; el cambio de mentalidades de los obreros y la llegada a la escena política de nuevos actores. Mucho antes, sin la imprenta, el cisma luterano en la Iglesia Católica no se hubiese extendido con la rapidez con la que se hizo.

Mientras, los iraníes siguen en sus televisores con los culebrones habituales, muchos compatriotas intentan que el mundo vea lo que está sucediendo en el país a través de Facebook, muy utilizado por los seguidores de Musavi,Twitter o Youtube. Un torrente de información confusa, llena de rumores y con mucha furia. Así ha pasado con Neda. La mujer muerta en la calle se ha convertido en un mito. Un símbolo de la crisis de Irán gracias a las herramientas sociales. Desde que se supo de su muerte, la gente le dio nombre en la Red. Neda. La palabra que en significa 'La Voz' o 'La Llamada'. farsi

1 Sin tener claro quién es Neda, una soldado, una manifestante o una persona que pasaba por allí en un mal momento, su muerte lo ha cambiado todo. Neda se ha convertido en la mártir de la causa contra Ahmadineyad. En la persona que perdía la vida mientras otra la grababa con la cámara de su teléfono móvil.

Las redes sociales, un fenómeno propio de este siglo, han alcanzado su mayoría de edad con la crisis de Irán. Protestas por la actuación de las Basij y de la política de oscurantismo de la República Islámica de Irán llegan vía Twitter de todas las partes del mundo. A un ritmo que ningún medio de comunicación sería capaz de mantener.

Cualquier plataforma es útil para mostrar las quejas de los iraníes contrarios a la reelección del presidente Ahmadineyahd. Twitter es la ganadora hasta el momento como elemento que más problemas le está generando a Teherán. 140 caracteres de libertad para unos ciudadanos con problemas. Si a esto le unimos las imágenes twitteadas el impacto crece exponencialmente.

Los dirigentes iraníes lo saben, y no paran de hablar en contra de esta herramienta de Occidente con la que, "bajo la intermediación de norteamericanos y europeos" se opera estos días "en contra de la Revolución".

Las actualizaciones dentro del tag iranelection llegan a más de 2.000 cada diez minutos minutos. Incluso muchos de los protagonistas de esta historia creada con la aportación colectiva han cambiado su 'aspecto' en la red, tiñendo de verde su avatar en Twitter. Una iniciativa a la que ya se han sumado más de 5.000 personas.

No es la primera vez

El gran sueño de Twitter al nacer era convertirse en una herramienta de comunicación. Lo es y además tiene otra característica interesante en estos días. Es muy difícil de censurar. Incluso gracias a ciertas aplicaciones actualizando Twitter se incluye cada micropost en Facebook, por lo que la mancha de aceite se amplía tanto a tus seguidores en Twitter como a tus amigos en la red creda por Mark Zuckerberg.

Esta revuelta social en la Red no es nueva. En la última cumbre del G-20 en Londres, la forma de seguir los movimientos de los grupos antisistema por la ciudad era gracias a un canal de comunicación de Twitter. Ahora mismo, no hay evento de importancia global que no se traslade a la Red. Y al revés, no hay tema importante en Internet, que no acabe en los medios tradicionales. Más tarde, eso sí.

Colectivamente, Twitter refleja los intereses de la colectividad en un momento concreto. Y puede ayudar a crear opinión. Aunque tiene sus riesgos. Nada en Twitter puede ser verificado. La autenticidad de un usuario depende de lo que haya hecho a lo largo de su trayectoria. Twitter puede ayudar a lanzar un mensaje, publicar una foto o enterarte de una historia, pero también puede servir para intoxicar, manipular y engañar. Es una herramienta, por lo tanto de su buen o mal uso, se desprende su utilidad.

Twitter podrá con la censura en Irán

Como se pregunta la periodista de 'The New York Times', Nohan Cohen, se podría poner la etiqueta de 'Revolución Twitter' a lo que está ocurriendo en Irán. Según cuenta, los escépticos dicen que es tan poca la gente que tiene acceso a esa herramienta u otras como wikis, blogs o correos electrónicos en Irán que no tienen influencia. Sin embargo su papel es muy importante para que el mundo descubra lo que está ocurriendo en Irán. Con los periodistas expulsados del país, o recluidos en sus casas en el mejor de los casos, sin la vía Twitter el resto del mundo no se enteraría de nada de lo que allí está pasando.

Es una herramienta muy útil para conocer el estado de opinión en el mundo. Por lo tanto no puede catalogarse de la Revolución Twitter porque lo que está pasando es tan real, y duro, tanto en Teherán como en otras ciudades iraníes, que sería banalizar el problema. Más con muertos sobre la mesa.

Aún así, en la última semana, la sociedad en general, y los medios en particular, hemos aprendido unas pocas lecciones sobre lo que tecnología puede hacer por la democracia y la libertad de expresión. E internamente, para los medios, Twitter es una potente herramienta para criticar y controlar lo que hacemos. Que no se nos olvide.

Twitter, herramienta de la revuelta popular