"El fin de la campaña militar en Mosul marca el inicio de una nueva fase de apoyo internacional para Irak" que requerirá un apoyo "sólido" para "preservar la humanidad", ha explicado el comisario durante la reunión de Alto Nivel sobre los desplazados internos en Mosul en Washington, donde ha anunciado la nueva ayuda, que eleva en total a 340 millones la ayuda humanitaria comunitaria para Irak desde 2015.
Los nuevos fondos europeos contribuirán a asistir y proteger a la población civil iraquí en las zonas liberadas y a las familias que han perdido sus hogares, así como para garantizar servicios médicos de emergencia para atender a los civiles heridos en el frente.
"Juntos garantizaremos que todos los civiles están protegidos en Telafar, Anbar Occidental y Hawidja, así como en sus lugares de desplazamiento", ha prometido.