Ellos son los más expuestos al coronavirus, los que más tiempo permanecen con el paciente infectado por COVID-19 y debido a las grandes deficiencias en material para protegerse durante su imprescindible labor, han sido uno de los sectores más contagiados.
El 27,9% de los más de 7.500 enfermeros encuestados por el Consejo General de Enfermería (CGE) dicen haber tenido síntomas compatibles con la infección del COVID-19, lo que podría suponer que en torno a 70.000 enfermeros en España podrían haber estado potencialmente contagiados.
El 22,7% de los enfermeros encuestados aseguran que ya se han hecho el test de detección, y de todos ellos ha dado positivo el 32,2%, lo que podría evidenciar que en torno a 18.400 habrían dado positivo en las pruebas realizadas hasta el momento y que, consecuentemente 1 de cada 3 enfermeros ha dado positivo en el test.
El 76,2% de los profesionales con test positivos cree haberse contagiado prestando asistencia sanitaria, el 35,1% por la falta de equipo de trabajo o material adecuado y el 41,1% por el cuidado de pacientes no diagnosticados.
El 5% asegura haber superado ya la enfermedad, el 7,9% se encuentra en cuarentena fuera de la asistencia (lo que podría significar alrededor de 19.700 profesionales) y un 5% refiere tener síntomas y sigue trabajando.
Esta encuesta es una iniciativa de la Organización Colegial de Enfermería para conocer a fondo cuál es la realidad que están viviendo los enfermeros españoles en su lucha diaria contra la pandemia de COVID-19 en los hospitales, centros especiales de atención (como es el caso de IFEMA), centros de salud y residencias y centros sociosanitarios. El objetivo final es poder profundizar en el análisis de la situación, evaluar riesgos y contagios y adoptar todas las medidas que sean necesarias, además de las ya iniciadas, en defensa de los profesionales de enfermería.
Se ha desarrollado a través de un cuestionario remitido por email a toda la base de datos colegial de enfermeros. En los próximos días se harán públicos todos los resultados de esta macroencuesta realizada a nivel de todo el Estado.
El sector sanitario en Inglaterra, un país que se encuentra entre los más castigados por la pandemia en Europa con casi 100.000 contagiados y más de 12.000 fallecidos, se encuentra en la misma situación por la falta de material.
La Asociación de doctores (DAUKP) del Reino Unido se sumó este martes a las crecientes quejas del sector sanitario británico por la falta de equipamiento de protección ante el nuevo coronavirus en los hospitales y centros médicos del país.
DAUKP, formada en 2018 por profesionales del servicio nacional de salud (NHS, en inglés), afirmó que, a pesar de las promesas del Gobierno, todavía hay escasez de túnicas, gafas, mascarillas y guantes, entre otras cosas, en muchos puntos del territorio.
Previamente se han quejado por lo mismo el sindicato Asociación médica británica (BMA) y el Real Colegio de Enfermería (RCN), que ha indicado a sus miembros que, en ausencia de material protector, en "última instancia" pueden optar por no atender a los pacientes.
Datos obtenidos por la revista sectorial "Health Service Journal" y difundidos hoy revelan que un 10 % de los 280.000 enfermeros y matrones que hay en Inglaterra están de baja por coronavirus, lo que podría reducirse con el equipamiento adecuado.