El recuerdo de defensas previas podría ayudar a combatir el coronavirus

  • Podríamos eliminar la enfermedad sin generar los anticuerpos específicos

  • Superar otros resfriados podría ayudar a combatir el coronavirus

  • La inmunidad cruzada no evitaría la infección ni el contagio a otros

La investigación científica sigue dejando resultados alentadores, uno de ellos tiene que ver con la llamada inmunidad cruzada. Según un estudio desarrollado en EEUU con muestras de sangre previas a la pandemia de coronavirus y publicado en la revista ‘Cell’, nuestro organismo podría eliminar la enfermedad sin generar los anticuerpos específicos. Simplemente, con el recuerdo de defensas anteriores.

De momento es una posibilidad que solo ha sido analizada en algunos cultivos de laboratorio. “Son ensayos que apuntan a esta hipótesis, pero hay que hacer más experimentos, expresa con cautela María Montoya González, investigadora de inmunología CIB-CSIC.

Pero algo como, por ejemplo, superar resfriados por otros coronavirus -estos sí benignos-, podría estar ayudando a doblegar el COVID-19 sin tener que generar los anticuerpos concretos de la enfermedad. O lo que es lo mismo, podría ser derrotado con el recuerdo de otras defensas previas.

“En el fondo es buena noticia porque ello quiere decir que el sistema inmune es capaz de recordar ese tipo de patógenos y, por tanto, la vacuna, teóricamente, es más que probable”, celebra Montoya González.

Inmunidad cruzada

Una inmunidad cruzada que podría explicar por qué hay pacientes que aseguran haber tenido síntomas del virus y, sin embargo, haber dado negativo en los anticuerpos específicos que se analizan en los PCR y test rápidos.

“El sistema inmune es como un Ejército que tiene varias unidades”, añade la investigadora. Entre estas unidades, se encontrarían la de acción rápida y la adaptativa con anticuerpos y células de recuerdo que bloquearían, por error pero eficientemente, patógenos similares. Así habría funcionado en casi el 40% de las muestras analizadas por el Instituto de Inmunología de La Jolla, en California, Estados Unidos.

Este estudio sobre la inmunidad cruzada de lo que ya advierte es de que esta misma no evitaría la infección ni la posibilidad de contagio a otras personas. Para la esperanza, lo que no se descarta es que pueda explicar la baja incidencia del virus en niños o una protección mayor contra el virus de la que se conoce hasta ahora.