Coliflor, chocolate, lechuga... ¿Sabes qué tipos de alimentos son los que más cuesta digerir?
Lucía SicreMadrid
Determinados alimentos pueden provocar digestiones pesadasPixabay
Determinados alimentos pueden provocar digestiones pesadas: no tienen por qué ser necesariamente insanos, pero debemos vigilar cuándo y cómo consumirlos
La comida rápida o el alcohol son claros ejemplos de productos perjudiciales que no solo nos sientan mal, sino que resultan nocivos
Muchas veces basta con elegir el momento óptimo para consumir ciertos alimentos, como la lechuga o la coliflor, que deben evitarse en la cena
Comer sano es muy importante, pero no es el único factor que debemos tener en cuenta al planificar nuestra dieta. Por ejemplo, existen determinados alimentos que, por muy nutritivos y saludables que sean, deben consumirse moderadamente o evitarse durante la noche precisamente porque las digestiones que nos producen pueden ser pesadas.
Otros son tan poco saludables como digeribles, como ocurre con la comida basura o el alcohol. Algunas personas consumen este tipo de productos sin mayores problemas, pero quienes tienen un estómago algo más sensible pueden llegar a notar los desagradables efectos de una digestión pesada. Toma nota de los tipos de alimentos que más cuesta digerir.
Los alimentos que más cuesta digerir: evita las digestiones pesadas
No todos los alimentos se digieren igual, y este hecho debe tenerse en cuenta a la hora de elegir cuándo y cómo consumirlos en el caso de que sean beneficiosos para nuestra salud y no queramos sacarlos de nuestra dieta. Si, además, se trata de alimentos nocivos, desde luego lo mejor sería evitarlos pero, si vamos a permitirnos consumirlos de vez en cuando, es bueno saber que probablemente ese mala digestión o esa mala noche de sueño se debe a su efecto, y no a cualquier otra cosa.
Los motivos por los que un alimento puede ser indigesto son muchos: su composición, sus características... El resultado son posibles molestias estomacales, hinchazón, pesadez o flatulencias. Eso í, no todas las personas se ven afectadas por igual por estos efectos, y algunas no los notan en absoluto.En cualquier caso, siempre es de ayuda conocer cuáles son los alimentos más indigestos con los que puedes encontrarte. Estos son algunos casos:
Comida picante. El picante, si bien puede ser beneficioso para nuestra salud, también puede resultar pesado, al incrementar la producción de jugos gástricos y aumentar la acidez. El resultado puede ser dolor estomacal, debido a la irritación de las mucosas del estómago. Evítalo por las noches y no te pases con el tabasco y sus similares.
Lácteos. No es casualidad que exista un porcentaje tan importante de personas intolerantes a la lactosa (nada menos que un tercio de la población). La leche y sus derivados pueden provocar gases, diarrea y distensión abdominal, algo que se aplica también a quienes no son intolerantes. Si es tu caso, consúmelos con moderación o prueba productos sin lactosa, bebidas vegetales...
Alcohol. Todos sabemos que consumir alcohol no es precisamente sano, especialmente en dosis elevadas. Lo ideal es tomarlo con moderación y evitar los azúcares añadidos en la medida de lo posible. También es importante beber con el estómago lleno para reducir sus efectos nocivos.
Comida rápida. Aunque se trata de una generalización, normalmente la comida rápida suele contener un alto porcentaje de grasas saturadas, que son difíciles de digerir. Si consumes un menú de este tipo, es posible que sufras acidez o dolor de estómago posteriormente. Hamburguesas, pizzas, helados... entran en esta categoría aunque, lógicamente, todo dependerá de su calidad.
Café. Muchos no somos capaces de enfrentarnos a nuestro día a día sin él, pero hay que tener en cuenta que un consumo excesivo puede ser perjudicial para nuestro estómago, ya que estimula la producción de ácido. Intenta tomarlo una vez al día y, si te resulta pesado, combínalo con una leche vegetal o con una leche sin lactosa.
Coliflor y brócoli. Son dos alimentos muy sanos y recomendables para perder peso y mantener la línea, pero pueden producir gases debido a su contenido en rafinosa, un tipo de azúcares complejos. Su alto contenido en fibra no ayuda a contrarrestar el efecto de esta sustancia. Por eso es mejor evitar su consumo de noche, y combinarlo con otros alimentos.
Lechuga. Aunque es uno de lo símbolos por excelencia de una dieta sana, no es un alimento demasiado digestivo. De hecho, no se recomienda en absoluto cenar ensalada y, en general, no debes abusar de ella, ya que puede provocar hinchazón.
Alimentos ácidos. La naranja, el limón, el tomate... son alimentos muy saludables que sin duda deben estar en nuestra dieta, pero hay que tener en cuenta que son muy ácidos y que su consumo excesivo puede hacernos pasar un mal rato debido al riesgo de reflujos gástricos. Combínalos bien para contrarrestar este posible efecto.
Bollería y dulces. En general, cualquier producto cargado de grasas saturadas y azúcares resultará indigesto: tenlo en cuenta y piénsatelo dos veces antes de consumirlos.
Chocolate. Un consumo excesivo de chocolate puede ser perjudicial, por mucho que nos encante. Tómalo de forma moderada para evitar digestiones pesadas o episodios de diarrea.