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La variante recombinante XE XE de la covid19 ha llegado a España. De momento el impacto no es relevante -menos del 2% de los casos registrados-, pero muchos se preguntan si existe el riesgo de una nueva ola. La nueva variante, detectada por primera vez en marzo, tendría mayor capacidad de transmisión que las variantes parentales BA.1 (ómicron) y BA.2 (ómicron silenciosa), aunque todavía no hay estudios con suficiente información que permitan afirmar que esto es así. Algunos expertos creen que no va a suponer un motivo de preocupación, pero otros aseguran que no hay que menospreciarla.
"Ninguno de los organismos internacionales (OMS, ECDC) que se encargan de la vigilancia global del SARS-CoV-2 la ha incluido en sus listas de variantes de interés. Simplemente la consideran como una más de las subvariantes de ómicron que están bajo vigilancia en todo el mundo", explica en Informativos Telecinco el doctor Fernando González Candelas, miembro de la Unidad Mixta Infección y Salud Pública de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (Fisabio) y la Universitat de València.
"Dadas las características de ómicron, en la que hay dos linajes principales que se han distribuido ampliamente y causando coinfecciones y reinfecciones, es normal que se detecten nuevos recombinantes", como es la variante XE. "Se siguen con detalle su incidencia en los distintos países, tanto a nivel nacional como regional y local, lo que implica que en ocasiones se detecten aumentos importantes en la incidencia de alguno de ellos por efecto tanto del muestreo como de las características epidemiológicas propias del área estudiada", según precisa el experto.
El doctor Óscar de la Calle, vocal de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), tampoco cree que XE sea alarmante, pero confirma que es más transmisible: "Clínicamente, esta variante no es peligrosa, no es preocupante, pero los estudios in vitro demuestran que es un 15% más infecciosa que BA.2, que ya era más contagiosa que BA.1. A nivel poblacional, vemos que cuando surge una variante infecciosa, desplaza a la anterior", detalla a Informativos Telecinco.
Es importante vigilar las posibles amenazas, pero el posible aumento de la frecuencia de esa variante no es lo que subyace al ligero aumento de casos detectados en España en las últimas fechas, según el doctor González Candelas. La explicación más plausible es que sea resultado de los mayores contactos y menor control en las festividades de hace un par de semanas.
El cambio en la normativa sobre uso de mascarillas, en su caso, empezará a notarse en los resultados de esta y sucesivas semanas. En este sentido, el doctor Joan Caylà, miembro de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) y presidente de la Fundació UITB (Unitat d'investigació en Tuberculosis de Barcelona), cree que se retiró "demasiado prematuramente".
"Se anunció con mucha anticipación que el 20 de abril se quitaba la mascarilla. Y entre medias estaba la Semana Santa, por lo que parte de la población percibió que la pandemia está superada y que en esa semana podían tener interacción como hace dos o tres años", comenta el experto a Informativos Telecinco.
La falta de aislamiento en cuanto a casos leves y asintomáticos también puede haber influido. "Muchos pueden ir a trabajar y, teniendo en cuenta que es una infección muy contagiosa, no lo vemos adecuado. Además, los contactos estrechos de estos casos leves y asintomáticos también quedan perdidos", añade al respecto el especialista.
Hablamos, por tanto, de un incremento "multicausal", apunta el doctor Caylà, que advierte no solo del aumento de contagios, sino de hospitalizaciones: "La situación está empeorando si ves los datos. Los contagios han subido y los ingresos han aumentado un 47% en lo que va de mes. Teníamos sobre 4.000 y en lugar de bajar a 2.000, hemos subido a 6.000". "Puede que aumentemos hasta los 7.000 en los próximos días".
El doctor Lorenzo Armenteros, portavoz sobre covid19 de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), sí que advierte del riesgo de la variante XE. "Se trata de un recombinación de dos sublinajes de ómicron. Se ha producido en personas que han tenido las dos variantes. Hay usuarios que tuvieron ómicron en diciembre y ómicron silenciosa en estas fechas. El hecho de que se produzca la recombinación ya es alarmante", apunta.
El volumen de casos esperados con esta variante, no obstante, no llegaría a ser tan alto como con ómicron, según el doctor Armenteros. "Hay mucha gente que ha pasado ómicron", apunta respecto a este factor que puede influir. En esta línea, el doctor Caylà señala que "parece poco probable que la nueva ola pueda superar a la sexta".
"La sexta ola en España ha representado tantos casos como las cinco previas juntas. La Atención Primaria y la Salud Pública se vio sobrepasada", precisa el experto, que apuesta por no menospreciar esta nueva onda. Y los datos no mienten. Algunas comunidades autónomas, como Galicia o Navarra, presentan una incidencia acumulada a 14 días por encima de los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes. "Si antes con 500 de incidencia estábamos alarmados, con estas cifras deberíamos", apunta el doctor Armenteros.
La variante ómicron provocó en España "seis millones de casos", pero hay que tener en cuenta que ha sido poco agresiva en las vías respiratorias inferiores, afectando sobre todo a las superiores. Ha habido pocas neumonías, especialmente por la vacunación. La progresión de la enfermedad no ha sido muy alta.
"La posibilidad de enfermar con la variante XE sería similar a ómicron y ómicron silenciosa, pero esto es una teoría", apunta el doctor Armenteros, que facilita el perfil de los pacientes que pueden sufrir un cuadro grave: "Serían aquellos que no están vacunados, aquellos que no fueron infectados por ninguna de las variantes ómicron, es decir, que tuvieron contagio de delta o alfa, y aquellos que no han cursado una infección de covid, además de los grupos de riesgo".
El doctor Óscar de la Calle, por su parte y a diferencia del resto, recalca que "pese a haber tenido ómicron y ómicron sigilosa, te puedes contagiar con XE". "Es muy improbable, pero no se puede descartar que pueda ocurrir", resalta. Algo que no ayuda, según los expertos, es "el apagón informativo de la dimensión de la enfermedad". Al no aportar el Ministerio de Sanidad cifras diarias, aparecen "dudas" en una situación donde se contempla "un crecimiento alto de casos, especialmente en la población de 60 años". Algunos doctores también piden más datos sobre la población por debajo de esta franja de edad.
"Le damos muchas oportunidades al virus", denuncia el doctor Caylà. "En este momento hay mucha gente infectada y el virus se replica. Esto favorece que aparezcan mutaciones, como es la variante XE. Habría que ir un poco a por todas para frenar al covid. Esto es como comprar números de la lotería: cuando compras muchos te puede llegar a tocar", subraya.
La vacunación es una solución. La estrategia ideal sería "poder actualizar la formulación vacunal al ritmo que aparecen nuevas variantes, pero eso no es posible", según el doctor Fernando González Candelas. En estos momentos "se discute si sería mejor una vacuna con un cóctel de variantes (como la de la gripe) y cuál sería su composición, a la vez que se sigue investigando en encontrar vacunas más "generales", que no se vean tan afectadas por la aparición de variantes".
Hay hechos que no pronostican buenos augurios, tal y como apunta el doctor Armenteros: "La tercera dosis de Pfizer protege durante el primer mes un 70% frente a ómicron, pero a los tres meses se reduce al 30%. Hablamos de una protección muy corta en un período de tiempo y que desciende de una forma muy rápida".
Aquí surge la idea de emplear la vacuna Hipra. "Contiene dos subunidades proteicas, no solo se basa en la proteína spike, como las vacunas de Pfizer o Moderna. La inmunidad es más alta, por lo que podría aplicarse como cuarta dosis y su conservación es más sencilla que la del resto. Se podría pedir una autorización de emergencia, como en otros casos", explica el doctor.
Aplicar una cuarta dosis a la población en general es inefectivo en personas menores de 60 años, según indica el doctor Óscar de la Calle. "Hay que valorar varios criterios. La vacuna heteróloga hemos visto que incrementa la inmunidad de forma importante, cuando se combina Pfizer y Moderna. En este sentido, habría que valorar una vacunación de este tipo respecto a una cuarta dosis, si es necesario".
Lo que es relevante es que la tercera dosis de la vacuna covid tiene una cobertura muy mejorable, destaca el doctor Caylà. Solo se la ha puesto el 52% de la población, y "eso es muy poco". Mucha gente tiene la segunda dosis desde hace ya muchos meses y, con el paso del tiempo, la protección disminuye. Sería conveniente aumentar la cobertura de la tercera dosis. La cuarta dosis como tal, por ahora, solo se recomienda para personas vulnerables.