Izan, Ana María, Juan Ramón y Afra, los cuatro jóvenes fallecidos en Cantabria, eran amigos de la infancia
Los cuatro jóvenes fallecidos en el accidente de coche en Cantabria eran amigos de la infancia
Izan, Ana María, Juan Ramón y Afra se conocieron en la asociación Krecer
El lugar donde murieron los jóvenes de Madrid es un puerto a 1.350 metros de altura
Izan, Ana María, Juan Ramón y Afra, los cuatro jóvenes fallecidos en el accidente de coche en Cantabria, eran amigos de la infancia. Los cuatro jóvenes, naturales de Vallecas, habían ido desde Madrid a Cantabria junto a otros cuatro amigos que iban en otro coche detrás de ellos dispuestos a pasar el fin de semana en una cabaña pasiega en San Roque de Riomiera para celebrar un cumpleaños.
Según recoge el medio local Diario Montañés, Izan, Ana María, Juan Ramón y Afra se conocían desde pequeños, cuando comenzaron a participar en las actividades de la asociación sociocultural Krecer.
El fatídico accidente
El siniestro tuvo lugar en un tramo elevado del Portillo de Lunada, que con sus 1.316 metros de altitud es el tercer puerto de montaña más alto de la comunidad cántabra, en el que las curvas se suceden una tras otra y donde no hay barreras de protección, como quitamiedos o muros.
El vehículo se salió de la vía y cayó por una ladera de unos 300 metros, en tonel y dando vueltas de campana.
Los equipos de emergencias fueron alertados por un aviso automático del móvil de uno de los ocupantes. Los rescatadores localizaron y accedieron hasta el lugar donde se encontraban pasada la medianoche y las labores se prolongaron hasta las seis de la mañana.
Los amigos de los fallecidos que viajaban detrás no vieron el coche
Los amigos de los cuatro jóvenes de Madrid fallecidos la noche del pasado sábado en el Puerto de Lunada, que viajaban en otro coche que iba por detrás --aunque no cerca-- del siniestrado y que resultaron ilesos, no vieron al vehículo accidentado salirse de la vía pero "se percataron de que algo había pasado" al ver "algún objeto" del vehículo accidentado sobre la carretera que reconocieron.
Así, los cuatro acompañantes del segundo turismo no fueron testigos directos del accidente pero "sí se dieron cuenta de que algo había pasado".
El Gobierno movilizó al lugar del siniestro al equipo de psicólogos para atender a los cuatro jóvenes que viajaban en el vehículo que acompañaba al siniestrado, que fueron trasladados a un alojamiento rural cercano al lugar del accidente y este domingo regresaron a Madrid.
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