Según ha informado el Consistorio en una nota, en reuniones preparatorias previas, se acordó que la mejor época para realizar esta labor de recuperación y limpieza de monte público, era precisamente el momento en el que se acabase la campaña fresera, cuando existe una menor presencia de inmigrantes, por lo que una vez llegada a su fin la de este año, se ha puesto en marcha un dispositivo que en principio pretende informar a las personas que ocupan estas chabolas ilegales, del procedimiento que se va a seguir en los próximos días para el levantamiento ordenado de estos campamentos.
De este modo, desde el Ayuntamiento de Moguer se intenta conjugar "en lo posible" las demandas de actuación contra estas ocupaciones ilegales de terreno realizadas parte de propietarios de explotaciones agrarias y fincas forestales en las que se levantan estos asentamientos, con las "más elementales normas de solidaridad y atención social", por ello, todas las gestiones previas así como el diseño del procedimiento que se va a llevar a cabo para el levantamiento se han consensuado tanto con representantes de asociaciones solidarias como con entidades que trabajan en favor de los derechos de los inmigrantes.
Así la concejal de Bienestar Social Paqui Griñolo, ha promovido junto a otros miembros del equipo de gobierno, y en colaboración con Cruz Roja y Cáritas; con la Fundación de Trabajadores Extranjeros de Huelva (Futeh), con la Comisión Católica Española de Inmigración (ACCEM), Huelva Acoge, Asociación de Ecuatorianos Los Andes, o la Comisión Española para la Atención Inmigración (Cepaim); además de con representantes de los sindicatos UGT y CCOO, una comisión de trabajo al objeto de que el dispositivo tenga especialmente en cuenta la problemática de las personas afectadas.
En este sentido desde este mismo lunes dos mediadores interculturales se están encargando de informar en los distintos asentamientos de la inminencia de la actuación sobre las ocupaciones ilegales, que además con la llegada del calor se convierten en un verdadero foco de infecciones, y en "un verdadero peligro" de incendio dado el carácter "altamente inflamable" de los materiales con los que se construyen las chabolas.
Los ocupantes están siendo informados de que en unos días se realizarán los levantamientos, así como de las posibilidades de trabajar en otras campañas agrícolas, mientras se intensifican las gestiones y disponer así del mayor número de pisos de acogida y albergues para poder atender a estas personas; a las que también se busca acomodo en las viviendas de algunas de las fincas agrícolas cercanas, o bien se les intenta ayudar para que puedan desplazarse a otras zonas de España a buscar trabajo de temporada.
Todas estas gestiones pretenden minimizar el impacto sobre el colectivo inmigrante de una actuación de levantamiento "cada día más necesaria" para poder garantizar la salubridad y seguridad de muchas zonas del término municipal, pero que pretende tener "muy presente" la problemática y las necesidades de los inmigrantes que ocupan estos campamentos ilegales, a los que se va a intentar apoyar en todo lo posible.
Asimismo desde el Ayuntamiento de Moguer se trabaja en la captación de ayudas tanto de empresas y organizaciones empresariales como de organismos y administraciones públicas con responsabilidad en este tema, de manera que entre todas las partes se puedan asumir los cuantiosos gastos que supone el levantamiento y la retirada de materiales, así como la limpieza y recuperación de los terrenos afectados.
"Por encima de todo, --ha afirmado la concejal Paqui Griñolo--, estamos delante de un problema de índole social y asistencial, y por tanto estamos intentando por todos los medios que el protocolo de actuación contemple una solución también humanitaria para estas personas que acuden a nuestra tierra buscando un futuro mejor".