Esta exigencia de una mayor atención a nuestros adolescentes la ha formulado el presidente de Salud Mental España, Nel A. González Zapico. Zapico cree que al "gran aumento de las patologías mentales entre los jóvenes" ha de llevar a las administraciones públicas a tomar este tipo de medidas entre las que destaca dotar de medios económicos y humanos a los colegios e institutos para que se aborde la salud mental de este grupo de población.
Su propuesta también incluye implantar la educación inclusiva en la universidad, la atención específica a menores y la puesta en marcha de posibles campañas sobre salud mental en las aulas.
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"Existe un aumento de patología mental en gente joven por asuntos diversos, estamos preocupados. Queremos que se ponga encima de la mesa para que se pueda revertir", ha reclamado González Zapico. Tal y como ha detallado el presidente de Salud Mental España, hasta el 50 por ciento de estos trastornos se manifiesta antes de los 15 años, y el 75 por ciento antes de los 18.
Este dato, según ha apuntado, "siempre ha sido así", pero ahora ha advertido de que existe "una nueva ola de nuevas soledades y realidades" en la gente joven, como el acoso escolar o las adicciones a las apuestas y el juego 'on line'. "Todos estos trastornos relacionados con las nuevas tecnologías pueden terminar en depresión, estrés o ansiedad, que están a la orden del día, y también otras derivadas que se pueden cronificar", ha advertido el experto.
En este punto, ha recordado que el problema real es que los jóvenes "no lo cuentan". "Queremos conseguir que se hable de ello con naturalidad, porque es importantísimo abordar estas situaciones desde la prevención, donde se puede intervenir. Hay que decirle a un chaval que, cuando se vean metidos en un embudo que les va atrapando, hablen con un amigo, por ejemplo. Hay que hacer redes y apoyarse en cualquiera con quien tengas confianza", ha pedido.
Medidas en colegios e institutos
González Zapico ha insistido en que, en este sentido, las escuelas son "fundamentales". Por ello, ha reclamado a las administraciones central y autonómica "actitudes y una voluntad política de verdad" para la atención de la salud mental de la población, centrándose también en los jóvenes.
"Sabemos que, de momento, lo que podemos exigir son actitudes, porque cambiar el sistema requiere muchos recursos. La clave es la prevención, informar y apoyar a la gente a través de la Atención Primaria, dotar a los institutos de personal que esté capacitado para atender a un chaval cuando vea que tiene un problema y, en definitiva, preguntarnos qué necesitan", ha resumido.
Por otra parte, en relación al Plan Nacional de Prevención del Suicidio anunciado por el Gobierno el pasado junio, ha reclamado nuevamente que "se discuta y se ponga en práctica" una estrategia de salud mental a nivel interterritorial, con unas medidas dotadas de "medios económicos y humanos y, a ser posible, un teléfono de emergencias similar al de la violencia de género".
"El suicidio es el problema más grave de salud pública que tiene España. 10 personas al día acaban con su vida por su voluntad. A veces, esa voluntad se cumple porque no hay medios para apoyar a la gente", ha concluido.
Advertencia de la OMS
Este análisis coincide con el realizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que afirma que la mitad de las enfermedades mentales comienzan a los 14 años, si bien la "mayoría" de casos ni se detecta, ni se trata.
Y es que, la adolescencia es una época de la vida en la que ocurren muchos cambios como, por ejemplo, cambiar de colegio, comenzar la universidad o un nuevo trabajo. Para muchos, estos son tiempos emocionantes, si bien para otros puede causar estrés y aprensión y, en algunos casos, si no se reconocen y manejan, estos sentimientos pueden conducir a una enfermedad mental.
En términos de la carga de la enfermedad entre los adolescentes, la depresión es la tercera causa principal, si bien el suicidio es la segunda causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años. En este punto, la OMS ha asegurado que, "afortunadamente", hay un creciente reconocimiento de la importancia de ayudar a los jóvenes a desarrollar la capacidad de recuperación mental, desde las edades más tempranas, para enfrentar los desafíos del mundo actual.
Del mismo modo, está aumentando la evidencia de que promover y proteger la salud de los adolescentes aporta beneficios no solo para la salud de los adolescentes, tanto a corto como a largo plazo, sino también para las economías y la sociedad, con adultos jóvenes sanos capaces de hacer mayores contribuciones a la fuerza laboral, familias y a la sociedad en general.
Por ello, la OMS ha recordado que se puede hacer "mucho" para ayudar a desarrollar la resistencia mental desde una edad temprana para ayudar a prevenir la angustia mental y la enfermedad entre los adolescentes y adultos jóvenes, y para controlar y recuperarse de la enfermedad mental. La prevención comienza con el conocimiento y la comprensión de los signos y síntomas de alerta temprana de una enfermedad mental.
"Los padres y maestros pueden ayudar a desarrollar las habilidades de la vida de los niños y adolescentes para ayudarles a enfrentar los desafíos diarios en el hogar y en la escuela. Se puede proporcionar apoyo psicosocial en las escuelas y otros entornos comunitarios y, por supuesto, se puede implementar, mejorar o ampliar la capacitación de los trabajadores de salud para que puedan detectar y manejar los trastornos de salud mental", ha explicado el organismo de Naciones Unidas.
Finalmente, la OMS ha señalado que la inversión por parte de los gobiernos y la participación de los sectores sociales, sanitarios y educativos en programas integrales y basados en la evidencia es "esencial" para mejorar la salud mental de los adolescentes.
Una inversión que, a juicio del organismo, debe estar vinculada a programas para aumentar la concienciación entre adolescentes y adultos jóvenes sobre maneras de cuidar su salud mental y ayudar a los compañeros, padres y maestros a saber cómo apoyar a sus amigos, niños y estudiantes.