Los estudios arqueológicos que se están llevando a cabo desde este jueves serán compatibles con la continuación de las obras de la futura plaza que se pretende construir en los terrenos del antiguo cementerio, excepto en la zona que ha sido señalada por los familiares de los represaliados.
La alcaldesa de Órgiva, María Ángeles Blanco, ha mostrado en un comunicado su "plena disposición con la Junta de Andalucía para que se conozca la verdad y los familiares puedan saber dónde están sus parientes que fueron víctimas de la represión franquista".
Asimismo ha añadido que "se van a estudiar todas las posibilidades y si fuera cierto que allí se encuentran los restos, sin duda, sería un alivio para las familias".
Por su parte, el asesor de la Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, Juan Francisco Arenas, ha explicado que en el catálogo de fosas de la Junta de Andalucía no hay referencia alguna sobre la existencia de estas fosas; no obstante al tener conocimiento de esta posibilidad se pusieron con el Ayuntamiento de Órgiva para iniciar los trabajos.
Así, ha señalado que este ayuntamiento "ha facilitado en todo momento los trabajos, paralizando las obras en el lugar donde se están realizando las catas de reconocimiento de dichas fosas" para verificarlas con los datos que los familiares nos están aportando.
Por otra parte, Pérez ha señalado que "tras acotar y analizar la zona por parte de los arqueólogos, la semana que viene continuarán con los trabajos, que consistirán en la limpieza superficial de los terrenos y en la intervención de los antropólogos y forenses con los restos que pudieran encontrarse para posteriormente cotejarlos con los familiares".
Esta previsto que en menos de dos semanas se pueda saber el resultado de las indagaciones.
Además, los representantes públicos, junto con los arqueólogos, han mantenido una reunión en el Ayuntamiento con los familiares para seguir cotejando datos que pudieran ser de interés de cara a los trabajos de investigación.