Un responsable emiratí no identificado, citado por la agencia de noticias estatal Wam, explicó que no hay indicios de ninguna de las dos cosas en la embarcación, que ha llegado ya al puerto de Fuyaira (Emiratos Árabes Unidos), en el Golfo de Omán.
Según la agencia, las autoridades llevan a cabo investigaciones para determinar las causas del incidente en alta mar.
Anteriormente, Mitsui O.S.K había revelado que el petrolero había sufrido una explosión cuando navegaba en el estrecho de Ormuz por un posible ataque externo, y que había un tripulante indio herido leve.
El Ministerio de Transporte nipón no descartó que el supuesto estallido en el buque, que transportaba 270.000 toneladas de crudo, fuese obra de piratas.
Sin embargo, el director del puerto de Fuyaira, Musad Morad, explicó que la embarcación resultó afectada por el fuerte oleaje ocasionado por un temblor de tierra cuando zarpaba de Al Ruis, en el emirato de Abu Dabi.
Se espera que el petrolero continúe su viaje hasta Japón después de ser sometido a un examen para evaluar los daños en el puerto de Fuyaira.
El petrolero, que tiene bandera de las Islas Marshall, había partido de Emiratos Árabes Unidos con destino al puerto japonés de Chiba, al este de Tokio, con 31 tripulantes a bordo, quince de ellos de nacionalidad india y otros dieciséis filipinos.