“Cuando me diagnosticaron el cáncer a los 22 años, nunca pensé que volvería a sentirme como la mujer que fui”, cuenta Jessica en su cuenta de Instagram donde ha publicado la sesión de fotografías en topless.
Ahora, desvela sentir “libertad y liberación”. No obstante, no todo el camino hasta llegar a la meta ha sido fácil. “Luchas contra esa sensación de ser bonita y horrible como si fueras el monstruo que mató al único que tú conocías”, expresa.
Además, la joven dice que es “una batalla personal solitaria”. Sin embargo, lo vivido, dice, “me inspira a no tener miedo de salir y amar de nuevo, y lo más importante, amar lo que soy, lo que he soportado y lo que viviré”.
Con la sesión, Jessica pretende “crear conciencia y luchar contra el cáncer de mama”. “¡Honraremos a TODOS los luchadores y TODOS los sobrevivientes durante todo el año!”, ha dicho.