La compañía presidida por Isidoro Alvarez se suma así a otros operadores de distribución como Carrefour, Eroski, Mercadona o Dinosol, que han decidido empezar a cobrar las bolsas con el fin de cumplir los objetivos del Plan Nacional Integral de Residuos y las disposiciones del proyecto de Ley de Residuos.
En concreto, El Corte Inglés comienza a cobrar, de forma progesiva en todos sus establecimientos de alimentación, cinco céntimos por las bolsas tradicionales y 50 céntimos por las reutilizables.
Desde la compañía destacaron que llevan más de tres años trabajando para la reducción del consumo de las bolsas de plástico, con acciones como el lanzamiento de colecciones de bolsas reutilizables y plegables, campañas de concienciación a clientes y planes de formación de empleados, sobre todo de personal en línea de caja.