La presunta violación, tal y como recoge Diario la Información, ocurrió en julio de 2018, hecho que la presunta víctima, por miedo y la delicada situación de salud de un familiar, no denunció hasta el pasado febrero.
Tras escuchar los testimonios de los tres acusados, compañeros de instituto de la presunta agredida, el jueves por la tarde, la Fiscalía de Menores solicitó su internamiento en régimen cerrado.
Asimismo hay un cuarto presunto agresor que está en Francia, debido a que su familia se trasladó a territorio galo para vivir hace algunos meses, aunque se desconoce si las autoridades le han localizado y arrestado. Precisamente este fue, según las declaraciones de uno de los arrestados, quien grabó el vídeo de la presunta agresión sexual. Por el momento, el archivo audiovisual no ha sido encontrado por la Guardia Civil.
Las declaraciones de los menores son dispares, ya que en un primer momento aseguraron que las relaciones fueron consentidas, mientras que el pasado jueves negaron los hechos.