Los restos del esquiador francés fueron hallados en 2005 junto con su equipamiento de esquí, a más de 3.000 metros de altura en la cima Bianche, en el norte de Italia, cerca de la frontera con Suiza.
Los investigadores consideraron que el hombre medía en torno al 1,75 cm, tenía unos 30 años de edad, y creen que su fallecimiento se produjo en primavera. También hallaron unas gafas, un reloj y trozos de su camisa con unas iniciales bordadas.
Al ver que la identificación no progresaba, el fiscal del Valle de Aosta decidió difundir a través de las redes sociales los hallazgos de la investigación, y pidió a los lectores difundir la noticia en Francia y Suiza.
La publicación llegó a través de la radio a una oyente francesa llamada Emma Nassem, quien afirmó que el hombre podría ser su tío, Henri Le Masne, nacido en 1919, asegura The Guardian.
"Soy el hermano de Henri Le Masne ... que probablemente sea el esquiador que desapareció hace 64 años” dijo Roger en un correo electrónico puesto a disposición por la policía.
Después de facilitar una fotografía del Henri, las gafas coincidían con las del esquiador encontrado, algo que confirmó más tarde el ADN.