Sin duda se ha convertido en una de las imágenes más lamentables de esta pandemia: el pasado 24 de marzo, un autobús con 29 ancianos de la residencia de Alcalá del Valle, Cádiz, llegaba a un hotel medicalizado de La Línea de la Concepción. Allí les estaban esperando unos pocos vecinos de la ciudad que les recibieron a pedradas y les increparon a gritos, insultándoles y acusándoles de llevar el COVID 19 a su región. Hoy los mayores han vuelto a la residencia de la localidad serrana.
El pueblo entero de Alcalá del Valle ha salido a la calle para recibir entre aplausos el convoy en el que volvían sus mayores. La residencia, que recupera la titularidad municipal, vuelve así a la normalidad tras haber sido un foco de atención durante la pandemia por sus numerosos casos de coronavirus.
Según ha señalado la Junta en un comunicado, son 28 los residentes que vuelven desde La Línea, ya que hay uno más pero está hospitalizado por causas ajenas al coronavirus. Además, se suman dos personas más, que debido a su estado de salud no se trasladaron a 'El Burgo Turístico' y permanecieron en un centro de Villamartín, tras ser curados y dados de alta del Hospital Virgen de los Montañas de esta localidad.
La Junta ha recordado que asumió la gestión de esta residencia municipal el pasado 20 de marzo, "después de que el alcalde renunciara a su competencia, dando encaje legal y jurídico al procedimiento en tiempo récord, de manera que finalmente se adjudicó a una empresa concesionaria, que la dotó personal sanitario".
Anteriormente, desde que el Ayuntamiento de Alcalá del Valle comunicó a la Delegación Territorial de Salud y Familias la situación de afectación por el COVID-19 entre los residentes, el Área de Gestión Sanitaria de Jerez, Costa Noroeste y Sierra de Cádiz articuló las medidas contempladas por el Ministerio de Sanidad.
Tras optar por la evacuación, desde el pasado 24 de marzo, los residentes de Alcalá del Valle "han estado perfectamente atendidos a todos los niveles en la residencia de tiempo libre de 'El Burgo Turístico'". Allí, Los Servicios de Asistencia Médica de Urgencias (SAMU), con más de una treintena de profesionales, se ha encargado de la asistencia sociosanitaria de los residentes, pero también de la atención de sus familiares, ya que durante su estancia en la Línea ha intentado que estos, en la medida de lo posible, tengan contacto con sus mayores a través de medios telemáticos, ha indicado la Junta, que ha agradecido la labor de todos los trabajadores implicados.