El pasado jueves 1 de marzo, un avión de la compañía Air Canada sufrió un tremendo susto en el aeropuerto internacional de Toronto. Según han contado diferentes medios ingleses, cuando la aeronave se disponía a despegar con destino a Vancouver el teléfono móvil de uno de los pasajeros explotó ocasionando un pequeño incendio.
El caos se desató entre los pasajeros, sin embargo, la tripulación consiguió extinguir el pequeño fuego en tan solo unos segundos. La única persona herida que resultó en el accidente fue la dueña del teléfono móvil. La cadena de televisión CTV Toronto ha podido contar con el testimonio de varios testigos. "La gente saltaba de sus asientos al pasillo. Parecía una pequeña llama del tamaño de una fogata. Si la explosión hubiese sucedido 20 minutos después, cuando estuviésemos volando, habría sido una situación realmente grave", declaraba uno de ellos.
Por suerte, el Boeing 787-9 con los 266 pasajeros que iban a bordo pudo continuar con su vuelo dos horas más tarde cuando el equipo de seguridad consiguió restablecer la normalidad. Este no es el único incidente parecido que ha ocurrido en la última semana.
El lunes 26 de febrero, el equipaje de mano de uno de los pasajeros de un avión destino a Guangzhou (China) estalló minutos antes de que la aeronave partiera del aeropuerto de Shanghái. Rápidamente la cabina se llenó de humo y los viajeros tuvieron que volar en otro avión tras tres horas de espera. El accidente fue muy comentado en redes sociales por la particular forma que tuvo la tripulación para apagar el fuego.