La abogada de la familia de Julen, Antonia Barba, ha asegurado que se han iniciado medidas judiciales por comentarios en tono de burla y que consideran ofensivos sobre la muerte del niño en las redes sociales. La letrada ha explicado que en las denuncias se están transcribiendo literalmente los comentarios, para que el juzgado los encuadre en el tipo delictivo que corresponda.
"Solo queremos que se paren estos comentarios porque no es de recibo", ha manifestado la abogada que también ha confirmado que se está preparando otra denuncia que "se interpondrá en breve".
Sobre el caso que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 9 de Málaga para determinar posibles responsabilidades penales en relación con el accidente, la letrada ha insistido en que "es muy pronto" y la investigación "sólo está empezando".
La primera diligencia que se va practicar es la declaración en calidad de investigado por un delito de homicidio imprudente del dueño de la finca, David Serrano, donde está el pozo --el próximo 22 de febrero--. Posteriormente, en días sucesivos, irán compareciendo, pero como testigos, otras doce personas, entre ellas los padres del pequeño, el pocero, la persona que realizó una zanja al lado y los senderistas que pasaron por la zona apenas tres minutos después de que Julen cayera al pozo.
La letrada ha dicho que "conforme vayamos viendo las cosas iremos pidiendo diligencias porque somos los primeros interesados en que se esclarezca todo", pero ha insistido en que al estar iniciándose la investigación es pronto para valorar en calidad de qué están citadas las distintas personas. Por otro lado, sobre el tapón encima del niño, ha indicado que es "fortuito" y "de material del propio pozo".
Ayer los padres de Julen, en exclusiva en el programa Ya es Mediodía dijeron que ellos no culpan ni al dueño de la finca, David Serrano, que sigue siendo de la familia, ni al pocero.
Los senderistas, que también deberán comparecer en el juzgado como testigos, aseguraron ayer en exclusiva a El Programa de Ana Rosa que cuando paseaban por la zona escucharon los gritos desesperados de la familia de Julen. Cuentan que no saben si el pozo estaba tapado o no y que ellos se acercaron a ayudar a unos padres desesperados. Solo llamaron a emergencias e intentaron consolar a los padres.