El Papa Benedicto XVI ha declarado este domingo su apoyo a los afectados por las inundaciones causadas por las fuertes lluvias en Tailandia, que han dejado casi 300 fallecidos y cuantiosos daños materiales en el país asiático.
Así, Benedicto XVI trasladó, desde la Plaza de San Pedro, su "cercanía" a las víctimas de Tailandia. También dedicó unas palabras en recuerdo de los habitantes de las regiones italianas de Liguria y Toscana, también afectadas por la crecida de las aguas.
"A todos ellos les aseguro mi oración", ratificó el Santo Padre durante el tradicional rezo del Angelus dominical.