Su comentario ha indignado a los británicos que piden respeto hacia los McCann cuya hija sigue desaparecida desde hace nueve años.
No entienden tampoco, como recoge, Daily Mail, que se pueda mezclar el juego de Pokémon Go con un caso que lleva tanto tiempo preocupando a las principales agencias policiales de varios países.
Por el contrario, las redes sociales se han llenado de comentarios que interpretan de forma benévola lo publicado por Scott.
Creen que su fotomontaje ha sido un acierto ya que vuelve a poner de actualidad el caso de Maddie. Aseguran que si todos pusieran el mismo empeño en buscarla que en cazar pokémones, quizás ya estaría con los suyos.