Justin Whittington, este joven de 23 años, protagonizó hace varios un hecho que ha impactado a todo el estado de California, propinándole un brutal puñetazo a su hijo de 3 años mientras compraban en un supermercado.
El pequeño cae desplomado al suelo siendo objeto de una brutal agresión por parte de su padre. Posteriormente, el niño sale llorando fuera del establecimiento con evidentes gestos de dolor, acompañado por una mujer embarazada, de la que se deduce que pueda ser su madre Crystal.
Las cámaras de seguridad del establecimiento recogieron toda la escena, la cual fue propagada por internet y terminó provocando la detención de Whittington.
En una página de Facebook conjunta, Crystal y Justin publicaron un mensaje que decía: "Mi nombre ha sido arrastrado por el fango más de una vez y cada vez que lo recojo lo lavo", refiriéndose a las innumerables críticas que había recibido por su acción.
Tras el arresto de Whittington, el joven deberá acudir a los juzgados el lunes por la tarde. Según la policía, el niño que requirió tratamiento hospitalario.