Omella, actual obispo de la diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, será nombrado arzobispo de Barcelona en una ceremonia el 26 de diciembre, en relevo del actual obispo Lluís Martínez Sistach.
Preguntado en rueda de prensa por lecturas negativas que se han hecho del nombramiento, el cardenal ha asegurado: "La Iglesia no vive en la estratosfera", sino que tiene conocimiento de la realidad. La Iglesia no tiene que hacer política, es una decisión pastoral", ha sentenciado.
Sistach ha considerado que Omella "tiene capacidad de adaptarse enseguida a la realidad catalana y rodearse de personas que le puedan asesorar".
"No es nacido en Cataluña pero sí en una diócesis catalana, la de Tortosa, donde fue bautizado y confirmado. No es Cataluña, pero es la franja, que se separó en el 1960", ha apuntado, y ha aclarado que la decisión no depende de él, pero confía en que será un buen obispo.
También ha revelado que ha conversado en él en catalán, y que Omella emitirá un comunicado "para saludar a todos los diocesanos de Barcelona, donde se podrán ver más cosas sobre su actitud y el espíritu con el que viene".
DÍA DE SANT ESTEVE
Sistach ha participado también en la decisión de la fecha del nombramiento, que coincide con la celebración catalana de Sant Esteve, y ha relatado que se han visto obligados a situarla ese día por razones como el largo puente de principios de diciembre y las elecciones generales del 20D.
También ha aclarado que se hará por la mañana, "así que se podrá hacer una sobremesa larga e incluso ir al concierto de Sant Esteve por la tarde, aunque no quiero hacer propaganda", ha bromeado.