Las temperaturas se cobran dos vidas en Andalucía y Extremadura por un golpe de calor

AGENCIA EFE 08/07/2010 07:12

Los fallecimientos se han conocido en una jornada veraniega en la que las elevadas temperaturas han motivado un nuevo récord de demanda eléctrica con 41.127 Mw, superior al fijado ayer y a la anterior marca histórica de 40.730 megavatios que databa del 17 de julio de 2006.

La mujer de 55 años murió la pasada madrugada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro Hospital Virgen Macarena de Sevilla, donde había ingresado el pasado lunes afectada por un fallo multiorgánico, a consecuencia de las altas temperaturas de los últimos días y la falta de aislamiento adecuado en su vivienda ha informado hoy la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía.

El joven muerto en Extremadura, tenía 24 años y ha fallecido supuestamente por un golpe de calor -la causa final de la muerte ha de ser dictaminada por el forense- tras sentirse indispuesto cuando jugaba al fútbol en Villar del Rey (Badajoz), ha informado hoy la Consejería de Sanidad y Dependencia extremeña.

Se trata de un varón de nacionalidad portuguesa, trabajador en la depuradora de este municipio, que ayer tarde, hacia las 19 horas, cuando estaba jugando al fútbol, se notó indispuesto, siendo trasladado a su domicilio, adonde acudió un equipo sanitario, según informa la Consejería en un comunicado.

La Consejería de Salud de la Junta ha recordado que el golpe de calor es un síndrome grave que se produce por un fracaso de la termorregulación por la exposición a unas altas temperaturas y ha recordado que los deportistas, trabajadores expuestos al calor, bebés, personas mayores, discapacitados o enfermos crónicos son especialmente sensibles a las altas temperaturas.

A partir de mañana las temperaturas empezarán a dar un respiro y se prevé que sufrirán un descenso significativo a partir del lunes 12, con la entrada de una masa de aire atlántico.

Hoy esta siendo el día mas caluroso del año en toda España, según datos emitidos por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), y mañana se irá produciendo un alivio térmico que comenzará por el noroeste de la península y que se irá extendiendo al resto del país, decreciendo cuanto más al sureste.

A partir del lunes entrará una masa de aire por el Atlántico que provocará un descenso significativo en el norte, según las mismas fuentes. Las temperaturas adquirirán valores normales dentro del periodo estival alcanzándose una media de 35-36 grados en el sur, 33-34 grados en el centro, alrededor de 30 grados en la meseta norte y en 27-28 grados en la zona norte costera, con lluvia débiles en algunos puntos.

Terminará entonces la primera ola de calor de este verano, un fenómeno que requiere una condiciones especiales y la suma de varios factores.

El meteorólogo y portavoz de la Aemet, Ángel Rivera, ha explicado a EFEverde el proceso de una ola de calor que "comienza cuando el aire cálido en capas altas provoca estabilidad" (el aire no se mueve de abajo a arriba ni al revés) dando lugar a que las capas de aire que están junto al suelo se calienten; se trata de un efecto similar a colocar una tapadera encima que impide el movimiento".

El aire se recalienta día tras día, explica Ángel Rivera, y va subiendo la temperatura ya de por sí alta por los cielos despejados y las noches tan cortas, lo que evita el enfriamiento de la atmósfera.

Si ese aire procede del interior del continente africano será más seco y con mucho polvo; por el contrario si el aire procede del Atlántico subtropical será un aire de carácter marítimo y por tanto húmedo que facilita el que se produzcan precipitaciones, llamadas "lluvia de barro".

Reciben este nombre por el color de las precipitaciones, y su tonalidad depende de la zona de procedencia del polvo: si la tierra es más oscura la lluvia será de color marrón o roja y por el contrario, si la tierra es clara, la lluvia será de color mas blanquecino.

No obstante, Rivera afirma que en las olas de calor existe un componente psicológico importante que acrecienta esa sensación térmica: "la gente pasa mucho calor por el día, duerme mal por la noche y al despertarse la sensación de cansancio se ha acrecentado con el consiguiente malestar físico y anímico".