Nilo: "Cuando Isabel me trajo, pensó que había traído un 'souvenir"

Hace unos días el cubano realizaba unas declaraciones incendiarias sobre Isabel Gemio y la relación que mantiene con ella. Desde que se separaran en 2004, Nilo no ha faltado el respeto a la que fue su mujer, pero ahora las cosas han cambiado. Nada tienen que ver las palabras que salen de la boca del cubano ahora con las que salieron cuando participó en un reality show.

"A Isabel Gemio no la quiero ver ni en pintura", declara Nilo ahora que ha rehecho su vida en Denia. Según él, desde que terminó la relación, la actitud de la periodista hacia él cambió por completo. "Desde que dejé de tocarla me ha cerrado todas las puertas, o está conmigo o en contra de mí". Considera que Isabel se ha portado mal con él en todo este tiempo y ahora le pone obstáculos para ver a sus hijos: "cada vez me pone las cosas más difíciles"

El cubano cree que "cuando me trajo pensó que había traido un 'souvenir', y yo hacía mucho que tenía carretera". Se considera un hombre libre que no sportaba estar en una jaula de oro y piensa que Isabel siempre miraba por su beneficio propio, manteniéndole al margen de todo, nunca le parecía bien nada de lo que hacía.

"Yo he sido de Isabel, su marido, padre de sus hijos y guardaespaldas. Cuando ha habido que discutir con la prensa he sido yo el que se enfrentaba, he discutido para que no la faltaran al respeto". La periodista siempre ha sido muy criticada por la prensa del corazón y él siempre ha defendido a la madre de sus hijos. Ahora esta misma mujer cree que no está siendo justa y no le deja ver a sus hijos cuando quiere.

Nilo Manrique actualmente vende pinturas en la calle, como cuando vivía en Cuba. Se ha sometido a una operación de espalda y le han dado la invalidez total en su oficio, por lo que recibe una pensión de 384 euros al mes. "No puedo tener a mis hijos porque mi casa no reúne las condiciones, pero estoy seguro que mi hijo, cuando tenga 18 años, vendrá conmigo". Ahora en vaciones quiere tenerlos e Isabel se los niega, él sabe que con él son felices, y no con su madre, que siempre va a sitios donde no les molesten.

"Para hacer feliz a Isabel, solo había que bajarle la luna, ahora solo tengo que contemplarla con mi actual mujer, esa es la realidad" es el resumen que Nilo hace de todo esto. A pesar de no ser feliz por no poder ver a sus hijos, ahora sí es feliz al lado de una mujer que le complementa.