Cada viernes, Víctor Sandoval llega a ‘Sálvame’ con su sección ‘Perro qué bien’ en la que conocemos a una mascota que ha sido rescatada y que necesita un nuevo hogar. El pasado viernes conocimos a Pizca, una cachorrita que, a pesar de su juventud, lo ha pasado muy mal dado que vivía con una persona que sufría el ‘Síndrome de Diógenes’ y el ‘Síndrome de Noé’, lo que le hacía acumular basura y convivir con múltiples animales, algunos incluso en proceso de descomposición.
La ternura es inevitable viendo a Pizca y Mila Ximénez lo tuvo claro. Ya en redes sociales advertía a sus seguidores: “Si no la adoptáis, me la quedo”. Y así ha sido, la colaboradora no quería que Pizca se fuera con nadie más que con ella y ha decidido adoptarla. Nada más llegar a casa, ya estaba enamorada: "¡La amo tanto ya!"
Y, apenas unas horas después, la colaboradora hacía toda una declaración de intenciones.