Leo y Miriam se confiesan en la gran final

La última gala de 'Supervivientes: perdidos en Honduras' nos ha permitido conocer más a fondo la personalidad de los dos finalistas, Miriam y Leo. Sinceros y diplomáticos, así se han mostrado ambos concursantes ante las preguntas realizadas por el presentador del concurso, Jesús Vázquez. Un cuestionario muy completo que nos aclararía muchos puntos de la forma de comportarse que han tenido en Honduras.

Leo Segarra ha sido el primero en enfrentarse a la ronda rápida de preguntas. Aunque el joven comenzó algo tímido y poco hablador, características que han predominado en el concursante durante todo su paso por los Cayos Cochinos, pronto cogió carrerilla y nos dejó ver al Leo más divertido de estos meses. "Me considero el más estratega del programa junto a Patxi", reconoció en 'triunfito' ante las cámaras de televisión. El joven asegura que en esta edición de 'Supervivientes: perdidos en Honduras' todos los concursantes han intentado robar comida, ya que la picaresca se acentúa cuando el alimento escasea. Admite que Miriam ha sido la más divertida del concurso pero reconoce que consiguió sacarle de quicio en numerosas ocasiones. Si tuviera que regresar a una isla desierta tiene muy claro que lo haría con Patxi y Lely, llevándose en 'la maleta' un machete, un mechero y a su familia.

Miriam Sánchez fue la segunda en contestar, con mucha picaresca como viene siendo habitual en la joven, a las preguntas realizadas por el presentador. Tampoco ella se corta a la hora de reconocer que ha sido una estratega durante estas semanas y que no ha podido evitar pactar en algunas ocasiones. La chica más sexy de la isla ha querido pedir perdón a su compañera Lely, a la que acusó de oler mal. "No he pensado casi nada en el sexo", esta ha sido una de las declaraciones que más ha sorprendido de la joven. Miriam también tiene muy claro con quién se iría a una isla desierta. Karmele y Nekal serían sus elegidadas. A la hora de hacer la maleta tampoco tendría muchas dificultades, ya que su hija, su chico, Pipi Estrada, y mucha comida serían los tres 'acompañantes' con los que viajaría.