Aquel día el programa, presentado por la periodista Ely del Valle, tenía como invitado a Coto Matamoros, que acudió a hablar de los motivos que les habrían llevado a vender las fotos de Lequio y Mar Flores a una conocida revista. Harta del discurso de su excuñado, Marián llamó al ‘teléfono de aludidos’ y soltó unos titulares que hoy cobran especial relevancia:
Cuestionó la profesionalidad de Kiko
Una de las dudas que planeaba por aquel entonces era la identidad de la persona que había filtrado a la prensa las fotografías de Lequio y Mar Flores en la cama. “Posiblemente Lequio tendría millones de copias y Miguel Temprano 300 millones, pero las fotos las tenía mi exmarido”, aclaró que Kiko “las tenía en el despacho de la productora” y añadió “la revancha ha sido por orgullo”. Unas palabras con las que ponía al padre de sus hijos en el punto de mira.
¿Fue Makoke el origen del conflicto?
Es sabido por todos que la relación entre los hijos de Kiko Matamoros y Makoke no es especialmente buena, pero, ¿es este el verdadero origen del conflicto? En su llamada telefónica, Marián Flores también habló sobre este tema.
Kiko y Marián llevaban 20 años casados y “aproximadamente un mes o 20 días antes de que naciera mi cuarta hija (Irene), que hoy ha cumplido 2 añitos, conoció a una persona y se marchó de casa”, declaraba Marián en su llamada a ‘Quédate conmigo’, aunque aclaró que ese no fue el detonante de su mala relación: “no hubo ningún problema, los problemas han venido después”.
Defendió a sus hijos con uñas y dientes
Fueron cuatro minutos de llamada, pero bien aprovechados. La exmujer de Kiko Matamoros aprovechó para hablar también del daño que se les había hecho a sus hijos con toda la polémica de la venta de las fotos de Lequio y Mar Flores. “Cosas como estas, no se pueden olvidar, intentamos apartarnos de esta familia”, añadió: “el daño se les hizo a todos, incluidos mis hijos, que estaban en colegios” y puntualizó que los pequeños habían sido “recriminados”.
Después de explicar todo esto, Marián dijo una frase que dejó impactados a todos los colaboradores del programa: “Sinceramente, lo que me da pena de mis hijos es que lleven el apellido Matamoros”.