Dos meses de baja para Aubameyang por la fractura de mandíbula sufrida durante el robo a su vivienda
Uno de los bolsos que los atracadores pidieron a la mujer de Aubameyang no lo había mostrado en público
Los investigadores no descartan que los atracadores llevaran semanas vigilando a la familia del futbolista
La esposa de Aubameyang relata cómo los ladrones la arrastraron del pelos y la abofetearon
Con la investigación policial todavía abierta, se van conociendo nuevos detalles del dramático robo sufrido en la casa familiar del jugador del Fútbol Club Barcelona, Aubameyang. Las autoridades no descartan que la familia llevara semanas siendo vigilada cuando el parte médico confirma que el futbolista sufre una fractura en la mandíbula.
En directo desde Barcelona, Mayka Navarro nos ha dado la última hora sobre el robo en el domicilio familiar de Aubameyang. Según ha podido saber los atracadores, en perfecto italiano, le pidieron a la esposa del futbolista modelos concretos de bolsos que había lucido en redes sociales y un modelo carísimo que no había mostrado en redes y que su esposo le había regalado durante una fiesta familiar.
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Algo que lleva a los investigadores a creer que los ladrones llevaban días vigilando los movimientos del matrimonio. Respecto al estado de salud del deportista, el último parte médico ha confirmado una fractura en la mandíbula, que fiche o no por el Chelsea mantendrá al jugador sin poder jugar al menos dos meses.
La esposa del deportista, siguiendo el consejo de los psicólogos ha querido que toda la familia regrese a la vivienda para poder retomar su rutina lo antes posible. Según ha relatado ella misma, al ver que los intrusos entraban en el domicilio comenzó a correr hacía el botón el pánico, que es un interruptor conectado con la central de alarmas, pero no llegó a tiempo. La agarraron por la melena, la arrastraron y la abofetearon, el futbolista intentó auxiliarla y en ese momento recibió un golpe con la culata del arma de los ladrones que fue el que produjo la fractura de la mandíbula. En su declaración asegura que los asaltantes se llevaron 700.000€ de botín y que ella no paraba de decirles “no tenemos más, nos robasteis hace cuatro días”.