Pone a la venta las cortinas antiguas de su abuela y descubre que son un “tesoro”: le ofrecen más de 2.000 euros
La mujer las puso a la venta desconociendo el valor que tenían para los coleccionistas
Sus detalles de bordado manual y su antigüedad fueron la clave de su revalorización
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Si guardas en el trastero de tu casa viejas lámparas, alfombras o cortinones antiguos de la abuela que desearías tirar pero que te da pena porque están nuevos, o que te desharías de ellos si supieras que alguien les daría una segunda vida, tenemos una buena noticia para ti: se venden bien por internet y, además, te sorprendería el precio que podrían llegar a alcanzar.
El medio checo Techsvet publicó recientemente el caso de una mujer que encontró unas cortinas antiguas en la casa de su abuela (aparentemente sin apenas valor pero que estaban nuevas) y las puso a la venta en una web de segunda mano, descubriendo en seguida que se trataban de un auténtico tesoro.
Cuál sería su sorpresa que un coleccionista francés llegó a ofrecerle la friolera de 50.000 coronas checas, unos 2.000 euros al cambio en la actualidad, que demuestra muy bien la importancia que han ido adquiriendo en los últimos años este tipo de piezas ‘retro’ o ‘vintage’.
Se lleva lo retro
Y es que el consumismo exagerado de la sociedad actual, caracterizado por la compra y la acumulación de objetos y bienes sin ningún otro criterio que el de ir a la moda (una moda que por cierto es cada vez más efímera) ha obligado a la industria a producir en masa grandes cantidades de productos con el resultado de que todos vestimos igual y decoramos la casa igual, por cierto, con materiales de peor calidad que nunca.
Es por eso que el estilo del pasado, lo antiguo, ha cobrado un protagonismo especial en los últimos años y se ha revalorizado muchísimo, por ejemplo, todo lo artesanal y de fabricación exclusiva, cotizándose muy bien sobre todo en páginas de segunda mano como Vinted, Wallapop o Etsy, entre otras.
Un “tesoro” en casa
Según Techsvet, las cortinas, que en su momento apenas constaron 10 coronas checoslovacas (40 céntimos), estaban confeccionadas en algodón con detalles de bordado manual en la técnica conocida como ‘crewel’, caracterizada, al parecer, por motivos florales típicos de Europa del Este.
Además, presentaban un acabado de encaje y un estado de conservación “casi impecable”, lo que incrementó el atractivo de este “tesoro” de colección que acabó vendiéndose por un precio seguramente muy superior al que la mujer tenía en mente.
Según apunta el medio checo, el caso de estas cortinas “no es un hecho aislado”, sino parte de una tendencia más amplia que ha revalorizado objetos cotidianos del pasado como alfombras, porcelanas y discos de vinilo, que en su momento eran comunes en los hogares y ahora son considerados artículos de colección.
Piezas que cuentan historias
En el caso de los productos textiles, su revalorización no sólo se basa en su antigüedad, sino también en los métodos y técnicas que se llevaron a cabo para su fabricación. Las alfombras o cortinas elaboradas a mano que cuentan con bordados o motivos decorativos exclusivos se cotizan especialmente, y si a ello se le añade un componente cultural de una región concreta, se convierten en piezas todavía más codiciadas.
Fue lo que sucedió con las cortinas de la mujer que expone Techsvet: la región de la antigua Checoslovaquia en la que se encontraron destaca históricamente por su tradición textil, lo que hace pensar que (sin verlas en persona) se trata de piezas artesanas de alta calidad únicas, con un gran valor para los coleccionistas y que, sin pretenderlo, cuentan una historia cargada de tradición y costumbrismo.
