John Cobra: "Si me entero en directo de los insultos hacia mi madre, me habrían tenido que sacrificar, o habría sucedido una desgracia"

telecinco.es 26/02/2010 02:33

Hoy tenemos en exclusiva, la entrevista más esperada de esta semana: Mario Vaquero, conocido como John Cobra, se sienta en este Confesionario tras su polémica actuación en la gala de la elección del candidato para representar a España en el festival de Eurovisión 2010 en Oslo.

Sabemos que será una entrevista muy criticada, pero como ya anunciábamos al comienzo de esta segunda temporada, este Confesionario se encuentra libre de censura, le pese a quién le pese.

Mario, ¿por qué te decidiste a presentarte como candidato a Eurovisión?

Por mi ilusión de poder triunfar en el mundo de la música, y la falta de medios y presupuesto que tenía, así que tomé como último cartucho la opción de presentarme a Eurovisión.

Mi principal finalidad es disfrutar de una vida dedicándome a la música y poder darle una vida mejor a mi mujer. En resumen y hablando claro, ser rico, porque famoso ya lo soy, y la fama sin dinero no me vale nada más que para aguantar bofetones.

¿Cuál es tu opinión sobre los demás cantantes que optaron a representar a España en Eurovisión?

Me alegro muchísimo que haya ganado Daniel Diges, porque es un chaval fenomenal.

A Samuel de Operación Triunfo le agradezco que fuera sincero y declarase el trato que se me dio el público desde el minuto cero de mi actuación.

A José Galisteo me gustaría pedirle disculpas públicamente, porque en el hotel tuvimos unas palabras al creer que él estaba detrás de todo lo sucedido en mi actuación, pero el chaval con toda su sinceridad me lo negó y le pedí disculpas.

Y Lorena, la que se cree Madonna y supuestamente tiene el culo como una paella, se me insinuó en el ascensor poniéndome su brazo sobre mi hombro. Se lo he contado a mi mujer, así que espérate qué no la coja la colombiana –dialécticamente hablando-, porque ya tiene ganas de decirle unas cositas a Lorena, que es una persona totalmente creída, narcisista y falsa.

¿Sigues enemistado con Pop Star Queen?

Mira Kiko, yo nunca más volveré a bailar el Tsunami, porque mató a 200.000 personas, ni volveré a dar mi brazo a torcer con una mujer como Karmele que no me ha devuelto la educación que yo he tenido con ella.

Porque Karmele me ha acusado de maltratador, y eso va a tener que demostrarlo. Y aunque yo me haya disculpado con ella, porque tengo más clase, las acusaciones que ha vertido sobre mí no las olvido, porque ella en ningún momento me ha pedido disculpas. Así que no pienso volver a retractarme ni a vender mis principios, ni variar lo que yo pienso.

¿Te arrepientes del altercado que protagonizaste tras tu actuación?

No me arrepiento. Puede ser que mi gesto fuera excesivo o mi reacción desproporcionada, pero siempre justificable, porque yo respondí a unos abucheos y unos insultos; así que hice lo que tuve que hacer, aunque me pasé un poco.

Porque yo sólo pido lo que doy, y no hay derecho a que yo entré a actuar con la ilusión de un niño, y se me abuchee desde el primer segundo, porque yo nunca habría hecho eso si en mi actuación me hubieran mostrado un mínimo de respeto.

¿Consideras justas las críticas vertidas sobre ti en los medios de comunicación?

Por supuesto que no, porque se me está crucificando en vida, sobre todo en la cadena depresiva que ya lo de triste se queda corto, que sólo utilizan mi imagen para ganar audiencia y dinero, ya que están agonizando, y encima son unos cobardes que no me dan derecho a réplica.

Ahora mismo soy el hombre más buscado de España, y sólo pido la oportunidad de defenderme de las brutalidades que me acusan, aunque ya está en mano de mis abogados.

¿De qué manera quieres aprovechar tu momento de fama?

Mi ilusión es poder triunfar en el mundo de la música o en el mundo del show, porque no me cierro puertas a nada, puedo ser escritor, showman, cantante, entrevistado, entrevistador… podré ser lo que yo me crea que puedo ser, porque ya bastantes barreras me pusieron en su momento, y pienso que ahora podré tener capacidad para lo que mi mente me haga creer que soy capaz.

Y ahora soy un ídolo le pese a quien le pese, tú mismo estás comprobando que aunque me abuchearan en la actuación, es mucha la gente que me apoya y me muestra su cariño por la calle, pidiéndome autógrafos y fotos a cada paso.

¿Qué sucedió después de tu actuación?

Vino un directivo de TVE y me dijo qué a ver si el que se iba a enfadar iba a ser él, pero no quise seguirle el juego por no terminar a galletas con él. Me pidió que saliera a disculparme y le contesté que ya lo había hecho y que no lo haría por segunda vez.

Así que me sacaron por la puerta de atrás, pero por la puerta grande, entre los aplausos y lágrimas de todos los que estaban allí.

¿Te gustaría disculparte por tu comportamiento?

Sí, me gustaría disculparme tanto con el jefe de producción de TVE, con todas las azafatas y todo el equipo, que me trataron fenomenalmente y apostaron por mí.

Y sobre todo a Anne Igartiburu tengo que pedirle mil disculpas por mi comportamiento, porque antes de la actuación vino a desearme suerte, me trató con cariño y compresión ¡y demasiado bien se portó conmigo!, porque a ella sí que le falté al respeto en su trabajo.

¿Crees que la reacción del público formaba parte de algún complot?

Tengo mis dudas de si eso estaba preparado por TVE o por los seguidores de Lorena, porque fueron ellos los que me increparon, que los vi que iban todos iguales con sus camisetas amarillas.

Yo no sé qué hice a ese público, que cada vez que salía mi nombre o mi imagen en la pantalla antes de actuar me abucheaban, y tan vergonzosa me parece mi actuación como la de ellos.

¿Guardas algún rencor a TVE?

Lo único que le reprocho a TVE es que no interrumpiera mi canción y pidiera al público que o paraban esa actitud o se iban a la puta calle, porque desde el escenario ni siquiera se escuchaba la canción y por eso me perdí dos renglones de la letra, aunque luego me reenganché.

Y también les reprocho que a todos los cantantes menos a mí se les entrevistara en el backstage.

¿Estás satisfecho con tu actuación?

Por supuesto, porque me sobrepuse a la situación y pude acabar bien mi canción, porque si hubiese sido por el público me habrían hundido, que con sus abucheos me desconcentré como cuando uno está echando un polvo y suena el teléfono.

Pero cumplí mi principal objetivo, que era cantar mi canción correctamente, porque ir o no a Oslo era para mí algo secundario.

¿Es cierto que parte del público insultaba a tu madre durante tu actuación?

Sí, yo cuando terminé de cantar exploté al ver a mi madre ahí acorralada, con la cara roja, sufriendo.

Y te voy a ser sincero, yo no vi cómo insultaban a mi madre como dije en la anterior entrevista, en realidad hasta el día siguiente de mi actuación no me enteré de lo que había pasado. Porque Kiko, sólo te digo, que si yo en ese momento veo lo que le estaban haciendo a mi madre, ¡a mí me tienen qué sacrificar ahí, qué quede bien claro!. Llego a ver que alguien levanta la voz a mi madre y no estaríamos hablando sólo de un tocamiento de genitales, allí habría pasado una desgracia y gorda, porque o me hubieran matado a mí o no sé qué habría pasado.

Aparte de los insultos del público, ¿hubo algo qué pudo contribuir a tu reacción desproporcionada?

Bueno, es una anécdota, yo conforme se iba acercando mi actuación, el backstage se me iba quedando pequeño, estaba muy nervioso, tenía la sensación de que la iba a joder, y me iba tropezando por todos sitios.

La presión era tal que sentía que me estaba jugando mi vida artística. Y yo soy una persona muy nerviosa, estoy en tratamiento con ansiolíticos porque los necesito, y se me empezaron a subir las pulsaciones, así que una persona ajena a la organización me facilitó medio Trankimazin.

Y mientras masticaba el milígramo de Trankimazin, le pedí un trago a uno que tenía un Bacardi con cola, y Kiko, esos tragos entraron como pan bendito. Así que luego me entró el siroco de la mezcla que me había tomado al terminar la actuación.

¿Por qué estás en tratamiento psiquiátrico?

Por falta de autocontrol y problemas de ansiedad, porque cuando me disparo no tengo freno. Pero soy consciente de que tengo que evolucionar y cambiar mi actitud, aunque a veces soy tonto de lo bueno que soy.

Yo caí en el tratamiento psiquiátrico durante mi estancia en la cárcel por la ansiedad mental que sufría, qué me iba a estallar la cabeza, porque no te puedes ni imaginar la presión mental que tengo diariamente, son problemas psicológicos que tengo.

¿Qué motivos te llevaron a la cárcel?

Fue en el 2002, se me acusó de lesiones graves, con el atenuante de legítima defensa con exceso de uso, e indemnicé a la víctima con una cantidad importante de dinero.

Mi padre me regaló un móvil -y para mí los regalos son algo muy importante-, y un día estando en la estación de tren me lo olvidé allí, y me lo “levantaron”. Me acerqué a los chavales de buenas maneras, pero el móvil no aparecía, y las cosas se empezaron a poner feas.

Me fui a mi casa y apareció el hermano de uno de los chicos a pedirme explicaciones de malas maneras y dándome voces, acompañado de uno que me zarandeó, y otro que me pegó un puñetazo. Así que me entré a casa y cogí un cuchillo para ahuyentarles, pero se me enfrentaron, me pegaron un sillazo y me dejaron el hombro colgando, así que a uno le pegué dos cuchillazos, -pero no por la espalda como dicen algunos, porque le tuvieron que extirpar el bazo y esa es la prueba-.

Me vi acorralado y me defendí como las ratas, aunque después cada uno cuenta la versión qué le da la gana. Luego con los años se aclaró todo, y ni el chico en cuestión ni su hermano que fue el que se llevó la puñalada, tuvieron nada que ver con el robo; y yo pagué el móvil más caro de la historia, con 2 años 3 meses y 6 días de mi vida.

¿De dónde viene tu apodo “El Cobra”?

Es mi mote de toda la vida en el barrio, siempre he dicho que soy rápido y mortal como una cobra.

¿Te consideras una persona agresiva?

No, soy una persona normal, y mi paso por la cárcel me enseñó muchas cosas: a esperar, a valorar, y que a veces merece la pena perder.

¿Crees que eres un buen ejemplo de reinserción?

Sí, porque yo no he seguido delinquiendo porque además yo no era un delincuente. Además, reinserción es una palabra que no sé ni para qué está en el diccionario, porque la propia sociedad te etiqueta y no te deja ser bueno, pero antes era un niño y siempre estaba a la defensiva haciéndome un nombre en mi barrio.

Se ha publicado en un diario valenciano que tu mujer Carol y tú fuisteis detenidos el pasado mes tras propinarte dos cuchillazos en la pierna, ¿quieres aclarar este asunto?

Perdóname Kiko, pero no voy a hacer ningún tipo de declaración sobre este asunto, ya que no he declarado ni en el juzgado ni en comisaría.

Mario, gracias por tus confesiones y por haber elegido este espacio para expresarte con total libertad y sinceridad.

Cambiando radicalmente de tercio, nunca os doy ningún consejo confesores, pero hoy os voy a dar uno de los buenos:

¿Habéis oído hablar de Oro por Euros? Te compra tus joyas de oro que ya no utilices, aunque estén viejas o rotas, y te las paga al precio oficial del oro.

Como el valor del oro está más alto que nunca, te puedes sacar un buen dinero extra.

Yo no lo conocía, pero un amigo mío me comentó el otro día que les había solucionado el mes. Yo voy a probarlo, y ya os contaré mi experiencia con Oro por Euros.

Por si os interesa, el teléfono es: 902023866

Si tienes alguna información que quieras compartir con este confesionario ponte en contacto con elconfesionariodekiko@yahoo.es

Por último, recordaros que El Confesionario de Kiko se encuentra en Facebook con más de 41.000 fans. No dejes pasar la oportunidad y sed los primeros en conocer todas las exclusivas que os brindamos en este blog.