El Ángel que odia los enfrentamientos, ese que dice ser ajeno a los grupos e ir por libre, ha sido descubierto por muchos durante este fin de semana. El primero ha sido Hans, ese concursante en torno al que está girando la acción desde hace días. Si la muñeca de Rebeca es un símbolo, Hans es el tótem de GH XI. Tenemos símbolo y tótem, solamente nos falta un lema. Se me ocurre que podría ser ese "España me quiere" que repite Indhira en tono de broma, aunque algunos no alcancen a apreciarlo de tal modo. La madrugada del sábado (casi todo lo importante ocurre de madrugada) ayudó a que Ángel quedara en evidencia. Es, desde entonces, un Ángel caído.
El concursante antes tenido como el más 'zen' se revela como un narcisópata. Me da la impresión de que Ángel proyecta en los demás sus propios defectos. Se considera inmune a aquello que critica, y utiliza sus propios juicios hacia los demás como una forma de autodefensa, que es también un modo de intentar vencer al otro. Este concursante, de aspecto físico cuidado hasta el detalle, ha visto que la única forma de abrirse camino en un colectivo donde los roles ya están bien representados, donde los dos grupos formados pueden fácilmente devorarse entre ellos, es intentando situarse por encima del bien y del mal. Por eso dice en el 'confe' que está harto del mal ambiente y el enfrentamiento entre los demás, e iguala un grupo con otro juzgando sus acciones como idénticas, sin considerar las motivaciones habidas en cada caso.
Es posible que solo igualando en lo negativo a los demás pueda conseguir destacar como el único positivo. Se considera mejor que todos, por encima de ellos, o así nos lo intenta vender. No hace falta aclarar que yo no compro, evidentemente. En definitiva, lo suyo no es muy distinto a lo de la 'extinta' Nagore, solo que este utiliza un planteamiento formal de aparente corrección. Donde aquella decía claramente que algunos de sus compañeros "son mierda" este simplemente sugiere que son todos lo mismo. De esta forma, el calificativo queda en una elipsis, aunque personalmente su discurso me suena igual que si dijera que son todos mierda, sin distingos.
Quizá esté dando vueltas a una idea más sencilla de lo que parece, y de forma menos rebuscada pueda decir que la técnica de Ángel es sencillamente la de poner el ventilador delante de la mierda, para esparcir esta y que le caiga a todos encima. Todos los demás, claro está. No es mala técnica, el problema es que él mismo se ha de terminar manchando antes o después. Y ese momento ya ha llegado. Este 'clon' de Jack Sparrow dice en el 'confe' que le cuesta "sociabilizarse". Tras el "vocabilizar" de Juan, descubierto por el amigo Tomás Blanco, viene ahora el "sociabilizar" de Ángel. Es parte de su campaña contra todos, que aplica de forma ordenada. De momento, sus primeras víctimas parecen ser Indhira y Hans.
Para poder relatar bien la conversación de Ángel con Hans debo hacer primero un repaso a lo sucedido antes, esa misma noche del sábado. Incluso convendrá que me detenga en un par de detalles de la fiesta india celebrada el viernes conmemorando (con retraso) el cumpleaños de Indhira. Dicha fiesta comenzó con el feo hecho por Tatiana al no querer vestirse de india, como hicieron el resto. Luego de eso, permaneció con Juan y Melanie en el jacuzzi durante aproximadamente una hora, mostrando los tres un claro desinterés por la fiesta de su compañera. Muy distinto este comportamiento al que tuvieron sus enemigos en la casa durante el cumpleaños de la propia Tatiana unos pocos días antes.
Extraña fiesta la del viernes, pues cuando aparecieron los rezagados recibieron su propia medicina al hacerles el vacío quienes antes habían estado tanto tiempo esperando. Además, a Arturo no le dejaron montar el chiringuito-escondite entre camas para su solaz y el de Indhira, lo cual provocó una airada reacción por su parte, solo abortada por Indhira en una de esas conversaciones que en parte justifican algunas de las críticas a Arturo. No estoy de acuerdo en que trate mal a Indhira, pero tampoco es un ejemplo de tacto y corrección. Tengo dicho que Arturo es borrico, y lo demuestra en bastantes ocasiones.
Cuando Indhira intentaba parar su intención de marcharse la siguiente semana a la expulsión de Juan, argumentando que no es cobaya de nadie (¿acaso no sabe a qué concurso se ha presentado?), le contestó: "Es que tú eres mujer". Resulta que por ser hombre su apretón es irrefrenable, pero no lo puede ser el de una mujer. Con sensatez, ella le aconseja que se vaya al cuarto de baño a aliviarse, claramente molesta por su respuesta. Cosas como esta contrastan con otras en que el 'Cali' se muestra bien distinto, como fue una conversación con Toscano, en el que este le dice que cuando salga va a tener a muchas mujeres a sus pies, mientras Indhira estará en casa esperando que la llame por teléfono. Arturo le responde: "¿Y tú que te crees? ¿Que no va a haber un montón de chicos que también estarán fritos con ella?" Una de cal y otra de arena. Arturo dice ahora que está "frito" por Indhira. Estos han pasado del "abrazo fresco" a la 'fritura andaluza' (uno de los platos que les sirvieron en la fiesta, por cierto).
El sábado noche se vivió una de esas convulsiones que hacen pensar en un cambio de decoración en la casa de Guadalix, aunque bien mirado son ya bastantes las noches convulsas sin que terminemos de ver un cambio real. El mismo Juan que dice "no voy a cocinar para esta gente, ni me voy a relacionar con ellos", horas más tarde está jugando a las damas con Hans, el mismo con quien mantuvo una agria disputa el jueves cuando les plantearon pactar a quien salvaban de la nominación. Por cierto, revisado ese momento me di cuenta que la primera opción dicha por el 'Calculín' fue "sorteo". No expresó primero su deseo de salvar a Melanie, sino que intentaba escurrir el bulto desde el minuto uno. Normal, si tenemos en cuenta que había pasado toda la semana haciendo el 'caracol' con Indhira.
Las nominaciones del pasado jueves fueron una nueva oportunidad aprovechada por Hans para demostrar que tener un par de arrestos (por así decirlo) no está en relación a los genitales de cada uno. Frases con gran sentido común como estas lo demuestran: "Se me dio una carta para salvar a una persona, no para rifarla. (...) A mí hace tiempo que me estás rifando, Juan". Aunque a este solo se le congeló el gesto cuando Indhira le dijo que estaba deseando sentarse con él en la sala de expulsiones. A Melanie ya se le había congelado un rato antes. Me transmitió el miedo a través de su rostro, y aún creo que no se ha recuperado del todo, de igual forma que no ha terminado de entender que con el sorteo propuesto por Juan estaba nominada al cincuenta por ciento, siendo Indhira quien le evitó ese riesgo. Sobre la nominación de Nagore, como dice Asesino_gente (no se dejen engañar por el nick) cuando Melanie contó que la 'extinta' había nominado en su lugar hubiera estado bien que alguien le hubiese respondido: como siempre.
Volviendo a lo del sábado, no fue una gran bronca sino la suma de varias pequeñas cosas. Primero, Hans escucha desde el baño una conversación en el jacuzzi entre Juan y 'Geranio' (perdón, Gerardo) en la que este último, tras solo dos días en esa casa, dice tener dos nominados fijos: Hans y Saray. Justifica la de la hija de Pilarita diciendo que no se relaciona mucho y no hace nada en la casa. Lo primero es insólito, precisamente llevo días viéndola interactuar con unos y otros, bien es cierto que fundamentalmente con las chicas. No pasa mucho tiempo hasta que Saray se entera de esa conversación, por lo que va al jacuzzi a preguntar si van a tardar mucho en salir, a lo que Juan responde con un poco amable: "lo que me de la gana".
Saray se enfrenta a los dos, evidenciando que ha escuchado la conversación o se la han contado, como es el caso. Tras esto, vienen varias discusiones cruzadas en las que intervienen Arturo, Saray, Hans, Juan y 'Geranio'. Ninguno sale bien parado de esta situación, quedando como unos marrulleros incapaces de resolver sus diferencias sin recurrir al insulto y la ofensa personal. Arturo llega a llamar "maricón" a Juan, quien no tarda ni medio minuto en intentar utilizar ese insulto interpretándolo con intenciones distintas a las de su autor. Como insulto es tan feo como cualquier otro, pero está claro que no se refería a su comportamiento sexual, de igual forma que no se debe llamar 'hijo de puta' a nadie sin que esto sea mentar a la madre de verdad.
Pasado este momento, Ángel evidencia que se le han dormido los 'chacras', y confiesa no poder convivir con nadie de esa casa salvo Tatiana, Toscano, Saray y Arturo. Supongo que a este último le mete, entre otras cosas porque es testigo de esa revelación. Supongo también que pretendía ver feliz a Hans, por ejemplo, a quien excluye de esa especie de excomulgación pública en la que curiosamente no incluye a Tatiana. Esto es el centro de la discusión entre Ángel y Hans referida al comienzo de estas líneas.
Cuando Hans le pide explicaciones a Ángel por lo dicho, este acude a un catálogo de reproches a quien hasta ese momento parecía su amigo. Que si no le gustó lo de la muñeca de Rebeca, que si debió haber ido al jacuzzi a enfrentarse a la cara con 'Geranio' en lugar de contarle a Saray lo que este había estado hablando, que si tú ya no eres igual y como hay cosas que no le gustan de lo que va viendo pues por eso decidió expulsarle del paraíso de sus 'intocables'. En el 'confe' llega a decir que es un chismoso. En su lista negra están, curiosamente, dos personas que han vuelto de la sala de expulsiones el pasado jueves y están nominadas de nuevo esta semana. Ángel no es tonto y pone su objetivo en dos de los concursantes supuestamente más fuertes para la audiencia.
Criticar a los demás lo que uno mismo hace, proyectando en otros los errores propios. Esto me parece que hace Ángel, además de defender una cosa y la contraria, incurriendo en alguna flagrante contradicción. De modo que odia las discusiones y los enfrentamientos, pero le dice a Hans que debía haber ido a enfrentarse con 'Geranio' en lugar de comentar sus palabras con sus amigos. ¿Para qué piensa este tipo que están los amigos? Que se ponga de acuerdo consigo mismo, por favor. O hay que evitar el enfrentamiento o todo lo contrario, pero ambas cosas a la vez no se puede.
Aparte de la ridiculez de seguir recordando lo de la Rosita de las narices, que no dudo le sentó mal y no le gustó pero no tiene importancia suficiente como para seguir utilizándolo como reproche, le afea a Hans algo que él mismo hace. O es que acaso su comentario sobre con quien puede convivir y con quien no es menos chismoso al estar hecho desde otra dimensión donde el mal no existe y las palabras no ofenden.
Hans interpreta las palabras de Ángel como una especie de traición, y le pone ante ellas de esa forma demoledora que solo él puede. Le parecen algo endebles las razones por las que ha sido expulsado de su paraíso 'zen', y le duele especialmente que permita entrar en el mismo a una Tatiana a quien desde su entrada en la casa dijo que iba a nominar con tres puntos por algo visto durante su labor de espía tras el espejo. ¿Tatiana y Toscano en lugar de Indhira y Hans? Qué curioso, ¿no?
En un momento de la discusión Ángel llega a decir que eso pensaba en un momento determinado, pero al día siguiente podía cambiar. De alguna forma sugiere que necesitaba hablar con Hans y aclarar las cosas, pero la charla no parece servir de mucho y termina como el rosario de la aurora con una enigmática frase del de la 'furgo': "Ya veré lo que me habéis apoyado en esta casa". Claro, porque han sido los nuevos elegidos de este mesías de pacotilla quienes le han dado su apoyo desde el primer día. Para él ambos bandos son iguales y cometen los mismos errores, porque todos van criticando a los otros, y en ambos ha visto pactar nominaciones.
Como dije antes, no tiene en cuenta quien comenzó a hacer cálculos para poner al grupo minoritario en apuros en las nominaciones. De no ser por Hans, esto seguiría siendo así, por injusto que pareciera. También el cambio de mecánica en las nominaciones contribuyó a desbaratar cálculos y previsiones. Qué injusto es ver como alguien analiza de forma superficial las cosas, igualando comportamientos solo parecidos. Pero a él le interesa plantearlo así para justificarse por poner su ventilador contra todos los demás, con la esperanza de que el viento favorable dé en su cara.
Termino con una deliciosa conversación entre Hans e Indhira que puso broche de oro a la noche del sábado, y además los porcentajes ciegos de esta semana. Para Hans ella es como esas mujeres de las películas de los años 60 del neorrealismo italiano. Mujeres con personalidad y fortaleza, que defienden con coraje aquello en lo que creen. Se le ve fascinado, no en vano es un amante de la cultura india, e Indhira es india hasta en su nombre. Los dos tienen nombres de idéntica inspiración. Estoy seguro de que Hans ve a Indhira ganando este concurso, igual que los indios vencieron a los ingleses sin disparar una sola bala, como nos recordaba el otro día lacabramarisol. Pronto le vemos entonando el Jai Ho (victoria en indio).
En cuanto a los porcentajes ciegos que nos descubrieron en el fantástico debate de anoche, donde estuvo una Belén Rodríguez cuya presencia espero ver repetida otros domingos, la votación va así hasta el momento: 76'5, 12, 5'2, 4'2 y 2'1 por ciento. Como coincide bastante con nuestra encuesta me puedo atrever a ponerle nombres. Respectivamente: Juan, Tatiana, Toscano, Arturo e Indhira. Así sea.