Echan del dormitorio al Koala

telecinco.es 24/09/2018 09:14

Con frecuencia el grupo dominante margina, aísla y repudia al molesto, el diferente, aquel que han decidido no pertenezca a su misma grey, ya sea por ser de distinta raza, nacionalidad u otros motivos aún más peregrinos. En la casa de los VIP molesta el Koala. Por eso anoche se consumó uno de los actos más expeditivos posibles de marginación allí: le echaron del dormitorio. No es uno de los nuestros, debieron pensar. ¿Qué diablos hace el mozo de las cuadras durmiendo con la crème de la crème? Ya está fuera.

En realidad, pienso que le hicieron un favor. Son la flor y nata, sí, pero del cutrerío imperante. Ya hemos puesto a Miriam en su sitio, debieron pensar. Ahora toca ir a por el Koala. Durante la fiesta hawaiana del viernes veía a Miriam resistiéndose a la horrible idea de estar en esa casa y no vivir la experiencia a tope. Por eso bailaba y bailaba sin parar, conservando una esforzada sonrisa, ajena a lo que pasaba en derredor.

Menos mal que Miriam era ajena a todo porque en ese momento Suso afirmaba: “Hay que quitarle el alcohol”, y Makoke remataba: “La conozco de fuera y no sabes lo que es”. Makoke no está contribuyendo de forma muy activa a la caza del molesto, pero de vez en cuando suelta sus perlitas de veneno. Y Suso se escuda en un particular humor que solo a él le hace gracia para repartir tósigo a paletadas. Paletadas de paleta, no de paleto, aunque igualmente podría darse por bueno. Viendo la secuencia que relato no pude evitar acordarme de una canción muy adecuada del gran Serrat: ‘Los macarras de la moral’.

“Y te acosan de por vida, azuzando el miedo, pescando en el río turbio del pecado y la virtud, vendiendo gato por liebre a costa de un credo que fabrica platos rotos que acabas pagando tú”, dice en algunos de sus versos la canción, que sigue así: “Son la salsa de la farsa, el meollo del mal rollo, la mecha de la sospecha, la llama de la jindama. Son el alma de la alarma, del recelo y del canguelo. Los chulapos del gazapo. Los macarras de la moral”. Y en su parte definitiva canta Serrat: “Hay que seguirles a ciegas y serles devoto. Creerles a pies juntillas y darles la razón que: ‘El que no se quede quieto no sale en la foto’. Quien se sale del rebaño, destierro y excomunión”.

Miriam los llamaría “chulos de miércoles”, aunque mejor con hashtag, como le gusta a ella: #ChulosDeMiércoles. El Koala se ha salido del rebaño y anoche fue desterrado al otro dormitorio. Dormía junto a Darek desde la primera noche, que casi compartieron con las cabras, y tenía ilusión por dormir a su lado hasta que saliera de la casa. No será así. Anoche se ganaron las camas que les faltaban. Lo hicieron mediante una esforzada prueba en la que precisamente fue básico el concurso de Darek. Tenían que acarrear tirando de un arnés un camión de alto tonelaje. Formaron dos grupos, pero el primero lo llevó hasta el final. Habían ganado 7 camas.

Sin haberlo hablado con el grupo se inventaron entre varios que se quedaban las camas nuevas los que antes llegasen. Se trataba de no respetar los sitios en los que habían estado durmiendo hasta ahora, aunque solo quedó excluido el Koala. Este no corrió ni sabía que debía hacerlo para seguir durmiendo en su sitio. Se quedó sin cama en el dormitorio que habitaba desde el principio. Tampoco había cama para él en el otro dormitorio, donde aún no estaban las dos camas que faltaban. En ese otro dormitorio habían tenido cama desde hace días Aramís, Ángel, Verdeliss, Makoke y Aurah. Y en dos nuevas camas estarán ahora Miriam y Koala. Los que se han salido del rebaño no serán nunca bienvenidos en el dormitorio del grupo dominante.

Miriam no rechistó y acarreó con su cama ella sola, sin apenas ayuda. Mónica, en un arrebato de humanidad, preguntaba a los demás si la ayudaban, porque hacerlo ella debía suponer demasiada humanidad. Para mayor infortunio, la cama de Miriam estaba coja de una pata. Todo lo que pasó anoche fue una alegoría. A Koala le ayudaron un poco más, pero no se le pasaba el enfado porque le hubieran sacado del dormitorio de malas maneras. Solo Miriam tuvo un detalle con él ofreciéndole su armario, aunque ella se tenga que quedar con la ropa en la maleta.

Mientras Koala se quedaba sin cama tuvo que escuchar las absurdas razones de Aurah, el hiriente cachondeo del machito Tony, el cínico colegueo de Asraf y la condescendencia de casi todos intentando convencerle de que iba a estar mejor en la otra habitación. Además de ver a Techi en el sitio que ha estado él ocupando, porque quiere estar cerca de Tony. El descaro de Techi con lo de su falsa carpeta junto a Tony llega a extremos insólitos, como cuando el otro día le decía a Isa: “Si sales antes que yo, busca a mi novio y dile que todo es un papel”. Como espectador me tuve que sujetar la mandíbula porque se me había desprendido. No doy crédito.

Cuando se dio cuenta de que habían quedado horriblemente mal, Suso quiso arreglarlo y fue a proponer a Koala que hicieran un sorteo para ver quién se quedaba el lugar de su cama. Que lo decía con la boca pequeña y por quedar bien queda demostrado porque no solo evitó hacer de verdad lo que proponía, sino que ante el grupo descalificaba su propia iniciativa. Ya lo había dicho antes, con idéntica poca convicción, Tony. “Ahora llamo a todos y votamos quién se marcha de la habitación”, le decía a Koala. “Ya es tarde para arreglarlo”, decía al grupo cinco minutos más tarde. Ayudas tan inútiles como las de Suso no las quiero. Siempre de cara a la galería, haciendo y diciendo cosas por interés.

Suso repetía que lo habían hecho mal y no se habían portado bien con el Koala. Pero cuando Aramís le dijo que se habían portado muy mal contestó molesto, advirtiendo de malas maneras: “Cuidado que tengo para todos”. Con que lo diga él basta, pero que no venga nadie más a sumarse a la idea no vaya a ser que tenga que repartir la medallita que pretendía colgarse anoche a costa del feo episodio que terminó con Koala de mudanza al otro dormitorio. Mientras todo esto sucedía, Verdeliss continuaba silente, ajena a lo que pasa en esa casa. Solo parece preocuparla el conflicto que puede generar la presencia de Miriam. Cualquier otra injusticia a su lado se la refanfinfla. O eso parece.

Tampoco dijeron nada al respecto los otros jefes de la casa. Verdeliss, Darek y Makoke toman decisiones esta semana respecto a las tareas y la organización en la casa. Por tanto, su palabra tiene un valor singular. También su silencio. En estas situaciones son culpables los que actúan y los que callan, como recordaba con acierto anoche @MarisaVidilla_ en Twitter. Además, decir que Koala es cómplice de lo que le están haciendo contribuye a engordar la espiral de marginación. De acuerdo que esto es tan solo un concurso, pero como decía Suso: son personas humanas (sic).

No es tan importante que logren echar a una persona de un dormitorio como la prepotencia mostrada o que intenten compensar al Koala con cutres regalías. Tony le decía que mañana (por hoy) no se iba a encargar de los animales, como si él pudiera repartir tareas en nombre de los jefes de la casa. Lo peor eran esas miradas y comentarios fugaces de quien considera que el Koala debería haber cambiado de habitación sin rechistar. Por propia iniciativa, incluso. Porque ellos son la salsa de este plato. “La salsa de la farsa”, “el meollo del mal rollo”, o sea: “Los macarras de la moral”.

No pretendamos que Koala se arme de valor y decida ponerse contra todo el grupo. No es ese su carácter, y cada uno juega su concurso como sabe y puede. Él aguanta y aunque lo nominen en masa o marginen desterrándole al otro dormitorio intenta no mostrar rencor y sigue llevándose bien con todos. Todo lo contrario que Mónica, por ejemplo, que días después de soltársele la risa a Koala en una gala seguía diciendo que no va a olvidar ni perdonar. Debemos entender que contemporice un poco, porque cuando tiene que mojarse se moja, como anoche al elegir a Suso respondiendo a quién metería para siempre en un corral. Este es el Koala de verdad, no el que algunos quieren vender en esa casa.

Solo hace falta repasar las nominaciones de Koala. Dio puntos a Asraf, Aurah y Mónica. Isa, por su parte, nominó a Ángel, el propio Koala y Miriam. Perfectas nominaciones de uno y perfecta integrante del rebaño la otra. Pero, claro, es que Koala es reconocible como concursante de GH, mientras lo de Isa es otra cosa. Se lo dejó bien claro Miriam el viernes en una conversación: “Yo no he venido aquí a hacerme un Deluxe ni a sacar información de tu madre o de tu familia, mientras que otros sí”. La misma Isa parece no haber ido a otra cosa que a hablar de su madre. Y con ella, cosa que consiguió anoche en directo.

Gran éxito del programa que Isabel Pantoja entrase para hablar con su hija. Momentazo histórico de la televisión, sin duda alguna. Pantoja le ha cogido gusto y no sería de extrañar que su próximo disco lo grabase por teléfono. Con el dramático tono habitual de gran tonadillera no olvidó soltar algunos consejos de madre. Las madres casi nunca se equivocan y Pantoja estuvo acertadísima diciendo a su hija que se abra a más gente y no se limite a relacionarse con unos pocos. Mensaje muy a la línea de flotación de Techi, tal vez también para Asraf u otros. Oigo decir en la casa que todos están hablando ahora más con Isa. Por telepatía, debe ser.

El primer momento histórico fue la llamada 1 de Isabel Pantoja a Sálvame. Anoche vivimos el segundo momento histórico de la llamada 2. El siguiente debería ser Isa en plató el jueves escuchando la llamada 1. Este GH VIP parece patrocinado por los Javis, con tanta llamada. A mí es que me está pasando lo que a Miriam. Se lo decía en la mencionada charla del viernes, en la que le daba un revolcón importante: “Mira, Isa, tú a mí no me caes mal. Pero, a partir de ahora, tampoco me caes bien”. Por lo brillante de la frase hubiera merecido la pena que Miriam terminase con un mic drop, dejando caer el micrófono al suelo sin dejar de sonreír.

Coincido con mamá Pantoja en que cerrarse tanto en Techi está siendo un error. Sobre todo, escuchando a esta concursante decirle a Mónica: “Estoy tranquila porque tú no estás nominada”. ¿Perdona? Pero lo está su amiguísima Isa. ¿Cómo puede estar tranquila? Misterios, amigos míos. A Techi la empezaré a llamar Cyrano porque le sopla a Isa lo que debe escribir, especialmente cuando se dirige a su novio de fuera (que anoche estuvo en plató y hoy visitará la casa durante una hora). Debo decir que al revés pasa lo mismo, Isa es Cyrano para Techi. Esto de necesitar ayuda para escribir a los seres queridos se escapa a mi razón. Lo veo algo tan íntimo o más que exonerar el vientre.

El gato responde

Guardo algo para poner aquí desde el jueves. Durante la gala me preguntaba una amable seguidora por qué Techi no participaba en la prueba para elegir pareja de jefes de la casa. De inmediato hice lo posible por mandarle un técnico para que reparase su televisión. Urgencias gato encerrado al habla.

Moleskine del gato

A veces solo las respuestas de Miriam justifican su paso por el concurso. Makoke le decía: “Estás en un concurso, cariño. No estás en un resort”. A lo que Miriam respondía: “Aplícatelo tú cuando estás todo el día quejándote. Por el calor, por las moscas, por lo que sea. Estás en un concurso, no estás en un resort”. Que no cambie nunca, por favor.

Hubo posicionamientos a favor y aunque Koala pensaba que nadie le apoyaría se pusieron de su lado Aramís, Ángel, Darek, Verdeliss y Tony. Los demás apoyaron a Isa.

Y tenemos ya primeros porcentajes ciegos de la edición: 15,7 %, 30,9 % y 53,4 %. Al principio del programa eran estos otros, muy parecidos: 17,5 %, 29,1 % y 53,4 %. Invariable la primera posición. Falta ver a quién pertenece.