La gala de anoche nos mantuvo todo el rato con la sensación de no habernos enterado de lo que iba a pasar después, pero es que en verdad no nos lo habían dicho. Empezó fuerte y después aún lo fue más. Creo que los responsables de la cosa aplican a este producto televisivo aquello que recomendaba Cecil B. DeMille para una película; según este cineasta debía empezar con un terremoto y luego irse para arriba. Pues bien, algo así pasó con una de las galas más intensas y sorprendentes de la historia de Gran Hermano.
Los momentos emocionantes se sucedieron ayer de forma continua. Desde la expulsión de Li, que pareció afectar más a una llorosa Gisela, hasta la entrada de Palomares en la casa nueva, de la que parecieron alegrarse todos. Eso sin olvidar la salida por una puerta y regreso por otra de Mirentxu y Julito (a este no nos lo quitamos ni con agua caliente), o la entrada de las dos neumáticas. Estefanía, que siendo de afirma a sus nuevos compañeros que es de (donde reside), y a la que le gusta que le llamen , terminó la noche en la casa nueva; por su parte Lizz, modelo de la República Dominicana, y que quizá debió pedir al cirujano que le implantara una talla menos, fue a la casa vieja, encontrándose allí con una singular pareja como compañeros. En resumen, la casa luxury fue completada con las incorporaciones de Gisela, Palomares y Nany, mientras que en la nueva quedan Mirentxu, Julito y Lizz. Aunque la gran duda es ahora si esto va a quedarse así para siempre o habrá posibilidad de trasvase de una casa a otra, lo cual no parece descartable.
La forma en que fueron elegidos los destinos de los tres concursantes que quedaban en la réplica de la vieja casa de GH I, y el de las dos que se incorporan al programa tras un mes de andadura, fue el juego de las tres puertas, que algo me dice veremos en más ocasiones en lo que queda de edición. Un método curioso, que a este gato juguetón le quiere sonar un poco. Una nueva estancia en la casa, el cuarto de las puertas, sirvió para plantear el dilema primero a Loli y luego a Carlos H., que debieron tomar una decisión al azar. Un teléfono rojo sonó en el dormitorio, y quien lo cogiera debía ser el elegido para participar en ese juego de las tres puertas.
La primera en cogerlo fue la granadina, que no corría riesgo alguno, y eligió la puerta color 'verili', tras la que se encontraba Palomares. Loli llevaba un rosario entre sus manos, y no se lo pensó mucho a la hora de elegir una de las puertas. Más tarde era Carlos 'soylapera' el que cogía la segunda y última llamada, aunque en su caso corría un riesgo que no fue del todo determinado, aunque sospecho que le hubiera conducido a la casa vieja. Creo que esto hubiera pasado en caso de que el cántabro hubiera elegido la puerta vacía, pero eligió la azul celeste, tras la que se encontraba Nany. Con su decisión se cerraba el casting de , suponiendo la incorporación de esta a la 'casa 10' y la dominicana (que estaba tras la puerta verde) a la 'casa 1'.
Antes de que Palomares participase en la primera fase del juego de las puertas, se produjo la teórica salida de la casa vieja de Mirentxu y Julito, que fue presenciada por él y precedida por un momento intenso y lleno de cariño, especialmente el que le brindó la septuagenaria al enterarse que la audiencia había elegido a su mayor aliado en la casa para optar a ser concursante de pleno derecho, lo cual hizo aquella durante el rato que se abrieron los teléfonos a tal fin. Me creo la alegría de la abuela de esta edición cuando se enteró de la buena noticia para el manchego. La situación es ahora extraña para ellos, porque Palomares no sabe que quienes fueron sus compañeros en los últimos minutos que vivió en esa casa siguen habitándola, al tiempo que estos forman un trío inesperado que tendrá que soportar condiciones de vida que se les anunciaron como duras, de retorno a lo básico, si bien no creo que sea para tanto. Además, no termino de imaginarme a la modelo cañón con el pulpo canario y la abuela de carabina. De momento, anoche Julito no podía ni mirar a la cara de la negra explosiva que tenía al lado, supongo que por no poder evitar desviar la atención de sus ojos un poco más abajo.
Todo un festival de emociones en esta gala, durante la que además pudimos ver una buena colección de vídeos, como viene siendo habitual. El tratamiento de la bronca del domingo me pareció ejemplar, muy equilibrado y bastante generoso con Iván. Digo esto porque no vi apretar las tuercas en su contra, sino que considero bien reflejado lo que pasó en el resumen emitido anoche, especialmente por los muchos contrapuntos que iban jalonando la intervención del modelo. Sin esos apuntes de lo que decían a sus espaldas, en tiempo real, aquellos a los que se había enfrentado diciéndoles las cosas a la cara, hubiera parecido tan solo un capricho de Iván por meter un poco de bulla, quedando los demás como sus víctimas. En ese montaje de imágenes pudimos ver, y esta es una de las conclusiones más interesantes de cara al futuro de lo que suceda en esa casa, a Iván tirando a dar, provocando una bronca de forma voluntaria y premeditada, cuyo apelativo más grave fue prácticamente el de "pájaros" (para los dos Carlos), mientras que estos y Gema le insultan gravemente a sus espaldas, llamándole gilipollas y llegando a afirmar que en la calle le habrían partido la cara. Escuchar a Carlitos llamarle macarra a Iván es un sarcasmo sin igual.
Otras dos secuencias inéditas llenaron la primera parte del programa, aquella que coincidía con un partido de fútbol en otro canal cuya existencia afirman muchos aunque yo coincido con el pasillero en no creérmelo. La primera es la enésima discusión del matrimonio, en este caso por celos fundamentalmente. Quizá lo más preocupante fue que una vez más Carlitos amenaza a su mujer con marcharse del programa, contando públicamente al resto de sus compañeros que son pareja. Relaciono esto con las palabras que dijo Milá en la última conexión con esa casa, sobre que quien se quiera marchar tiene las puertas abiertas, ya que hay legión de candidatos a cubrir su puesto. Al temeroso marido se le heló la sonrisa, y no es una forma de hablar.
De la segunda secuencia habíamos hablado ya aquí, aunque en su día no la pudimos ver en su integridad. Se trata del 'comando jamón' formado por Iván y Orlando y he de confesar que viéndolo anoche me partí de la risa mientras me sorprendía aplaudiendo al televisor, algo bastante insólito. Son los dos canallas (en el buen sentido) de este , y verlos debajo de las fundas de los nórdicos de sus camas, entrando casi a rastras en el 'confe' para pedir un jamón, dándole a la 'súper' un plazo de 24 horas y afirmando estar dispuestos a todo, no tiene precio. Como tampoco lo tiene el que no quisieran descubrirse públicamente para que supieran quienes eran, cuando bastaba con mirar por la casa y ver al resto para saber quien faltaba. Fue uno de los momentos más divertidos e hilarantes que recuerdo en la historia del programa.
Me gustaría repasar brevemente algunos retazos que han quedado en mi memoria de todo lo que sucedió anoche. Me pareció ver a Gisela mucho más cerca de Iván, Loli y Almudena que de Carlos 'Cásper', el fantasma de . O que cuando le enseñaban a Palomares la casa, no tardó en preguntar si en el cuarto de maletas era donde se guardaban los productos de limpieza. Creo que allí tiene todo lo que él necesita básicamente: la plancha, los productos de limpieza, y un baño para vomitar durante las discusiones. O también que Orlando e Iván vivieron de otro modo la noche y mientras los demás recibían emocionados a sus viejos compañeros, a estos lo que realmente les preocupaba era cuándo entraban las 'playmates'. Son una gran pareja, y no quiero pensar en qué hubiera pasado si entra Lizz (la brasileña, para ellos) en esa casa. Aunque no descarto que la terminen conociendo, al menos los que permanezcan allí, ya que algún comentario de Milá me hizo pensar que el cuarto de las puertas se abrirá en más ocasiones.
Y termino con una brevísima reflexión. Cuando ayer escuchamos que empezaba realmente este no estábamos escuchando ninguna tontería. Aparte de que la próxima semana habrá jornada de Halloween (no sé cómo casará con el traje dedicado a la , que Méndez de Vigo prepara ya para Mercedes Milá), será esa la primera con nominaciones en la casa nueva, y también me parece que serán las primeras nominaciones a cara de perro, con perdón. La semana la pasarán subidos a esos zancos y al Segway (gracias a los compañeros del minuto a minuto por enseñarme el nombre de esa especie de patinete motorizado), pero a su término podremos asistir a ese ritual inigualable de unas nominaciones fetén. Esto es un sinvivir. Delicioso sinvivir, eso sí.
[Dejo vídeo de la salida de Li y la entrada en la casa nueva de Gisela, que también podéis encontrar en MiTele, donde os lo podéis llevar a una web o blog y enviarlo a un teléfono móvil.]
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