Francesco Arcuri es la ex pareja de la que Juana Rivas ha huido para no entregarle a sus hijos. Una condena de 3 meses de prisión y una orden de alejamiento recae sobre él, con lo que él recuerda que se debió a una discusión motivada por la vuelta de Juana "tras una noche de fiesta". Así ha asegurado Arcuri que sus hijos sí quieren estar con él, que su relación con Juana fue normal y que siempre se ocupó de los pequeños incluso más que la propia Juana.