Arabia Saudí

Muere el 'príncipe durmiente' saudí a los 36 años tras dos décadas en coma: sufrió un accidente en Londres en 2005

El conocido como 'príncipe durmiente' saudí ha muerto en Riad, a los 36 años, tras permanecer dos décadas en coma. X/@irfan_speak786
  • El 'príncipe durmiente' saudí cayó en coma tras un grave accidente de tráfico en Londres en 2005, cuando tenía 15 años

  • Al Waleed bin Khalid Al Saud, que sufrió una hemorragia cerebral y una hemorragia interna, nunca recuperó la consciencia

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El príncipe saudí Al Waleed bin Khalid Al Saud, que estuvo en coma durante 20 años tras sufrir un grave accidente de coche en Londres, murió este sábado en la planta de Cuidados Intensivos de un hospital de Riad a los 36 años y su funeral se ha celebrado este domingo en la capital de Arabia Saudí. Conocido como el 'príncipe durmiente', fue noticia cuando, en 2020, movió una mano.

"Con un corazón que cree en la voluntad y el destino de Dios, y con profunda tristeza, lamentamos el fallecimiento de nuestro amado hijo, el príncipe Al Waleed bin Khalid bin Talal bin Abdulaziz Al Saud, que Dios lo bendiga. Las oraciones fúnebres se celebrarán el domingo", afirmó su padre, el príncipe Khaled bin Talal, en su cuenta oficial de X.

Por otra parte, la agencia oficial de noticias saudí SPA confirmó la noticia y aseguró que las oraciones fúnebres son, para los hombres, en la Gran Mezquita Imam Turki bin Abdulá de Riad.

Nunca recuperó la consciencia

Al Waleed cayó en coma debido a una hemorragia cerebral y una hemorragia interna como consecuencia del terrible accidente de tráfico ocurrido en Londres en 2005. Por aquel entonces, tenía 15 años y se encontraba estudiando en una academia militar de la capital británica.

Permaneció bajo supervisión médica durante estas dos décadas, sin recuperar la consciencia a pesar de breves episodios de limitación de movimientos, que fueron recogidos por sus familiares en diferentes vídeos, que iban documentando su atención en el centro hospitalario de Riad.

A pesar del tiempo transcurrido desde el siniestro, el príncipe Khaled se resistió a la retirada del soporte vital de su hijo. Se trata de un caso que atrajo la atención de millones de personas dentro y fuera del reino del país árabe.