El auténtico caos que se vive en la Sanidad de Madrid: centros de urgencias abiertos sin médicos ni enfermeros

Ya lo avisaron los sanitarios, sus sindicatos y la oposición política en la Asamblea de Madrid y es el conflicto que está disparando las protestas. El caos que ha generado el plan de reabrir odas las urgencias extrahospitalarias en la Comunidad de Madrid, con la mitad de personas que antes de la pandemia, según los sindicatos.

Este sábado 5 de noviembre sólo hubo médicos en 16 de los 80 centros de urgencia extra hospitalaria de toda la Comunidad de Madrid. De hecho, 15 centros ni si quiera pudieron abrir por falta de personal porque, atención, este es voluntario.

Un equipo de 'Cuatro al Día Fin de Semana' recorrió el sábado por la noche varios centros para comprobar cuál es la situación, convertida ya en un auténtico caos. Un caos del que Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la región, culpa a los partidos de izquierda en la cámara regional.

Mientras, una familia llega al centro de urgencia de Carabanchel por dolor de garganta y fiebre pero se encuentran con que no hay médico, sólo servicio de enfermería, por lo que, finalmente, deberán acudir a las urgencias de un hospital.

Tampoco atienden por un corte en el dedo, como es profundo, la envían al hospital. Los sábados y los festivos son los días más críticos. Con el nuevo plan para las urgencias, que haya o no personal depende de los voluntarios que se presenten.

Según los sindicatos, el gobierno regional ha reabierto los centros de urgencias con la mitad del personal necesario. Horarios y puestos de trabajo se han reestructurado y al menos 21 médicos se han dado de baja por los cambios.

Los principales sindicatos están en contra del plan, y aunque algunos le dieron una oportunidad, ya han retirado su apoyo. Altos cargos de la propia Consejería de Sanidad de Madrid también dan la espalda al plan.

El viernes dimitió en bloque la cúpula de la atención primaria en el sureste de Madrid. Por si esto fuera poco, mañana lunes arranca una huelga de médicos, que complicará, todavía más, la situación en la sanidad madrileña.