Andalucía prohíbe patinetes en el transporte público desde el 1 de enero de 2024
Para "primar la seguridad de los viajeros", la Junta de Andalucía impide los patinetes en metros, autobuses y catamaranes
En el último año y medio, se ha detectado "un número no despreciable de casos reportados de peligrosidad con VPM implicados"
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Los usuarios de patinetes eléctricos tampoco podrán montar en el transporte público de Andalucía estos vehículos de movilidad personal, a partir del 1 de enero de 2024.
Así lo ha dictado la Consejería de Fomento de la Junta, siguiendo los pasos de las prohibiciones comunicadas ya en otros puntos de España. Por ejemplo, en Bilbao recientemente o en los trenes de Renfe.
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Comunidades autónomas como la de Madrid también fijó esta restricción de acceso, al igual que el área metropolitana de Barcelona y Mallorca han aplicado la misma medida, ha recordado el Gobierno de Juanma Moreno.
Ahora, la región andaluza se suma a ella para "primar la seguridad de los viajeros" que se suben a los autobuses, metros y catamaranes. Se pretende acabar con riesgos como posibles incendios de la batería de los patinetes.
Algo que, según ha recalcado la Junta, "ya se han producido en los últimos meses" en el interior de transportes públicos. Por tanto, esta prohibición "temporal" se mantendrá hasta que esos riesgos "tiendan a remitir".
El certificado de seguridad de los VMP
Desde el Ejecutivo regional han mencionado también la resolución de la Dirección General de Tráfico, al respecto del certificado de seguridad de los VMP. Este permitirá sólo vender patinetes que lo lleven.
Será a partir del 21 de enero del 2024, por razones de protección al usuario y de seguridad vial. No obstante, dicha garantía no se aplicará a los vehículos que ya se hayan adquirido antes de la fecha indicada.
Disfrutarán de una moratoria hasta 2027 para poder seguir circulando sin regulación. Esta circunstancia ha tenido su peso igualmente a la hora de decidir que en Andalucía no se puedan subir al transporte.
Numerosos "casos reportados de peligrosidad"
Por otro lado, el Gobierno andaluz hace referencia a un informe que solicitó a la Escuela Técnica de Superior de Ingeniería de la Universidad de Sevilla. Los resultados se conocieron a mitad de este mes.
Recoge, "en el último año y medio", un análisis de "un número no despreciable de casos reportados de peligrosidad en los que se han encontrado implicados VPM". Con sus baterías eléctricas se habían subido a medios de transporte públicos.
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