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El informe del sector vitivinícola 2018, realizado por la EAE Busines School, refleja que el consumo de vino per cápita se ha estancado en España hasta los 11,26 litros por habitante. La caída ha sido muy similar tanto fuera como dentro de los hogares, aunque ligeramente superior en el primer caso (1,2 litros menos) que en el segundo (1 litro menos).
Este descenso viene provocado sobre todo por una mayor caída del consumo extradoméstico, que fue del 6,3%, frente al descenso del 2,4% del gasto en los hogares. No obstante, en ambos casos suponen el tercer año consecutivo de retroceso. Y eso que se ha demostrado sus beneficiosas propiedades.
El informe refleja que el gasto de vino por habitante en hogares en España el año pasado sí que ha registrado un crecimiento acumulado anual desde 2008, concretamente del 1,1%, habiendo pasado de 20,61 a 22,91 euros.
Por regiones, en Baleares y Cataluña se superan los 11 litros por habitante al año. Resulta paradójico que tanto Castilla-La Mancha como La Rioja, las principales zonas productoras vitivinícolas de España, sean de las regiones en las que se haga un menor consumo de vino.
En 2018, se alcanzó la cifra récord de producción mundial de vino, lo que ha supuesto un incremento sobre la del año anterior del 17,3%, mientras que las estimaciones para 2019, debido a las adversas condiciones climáticas prevén una caída de la producción.
España es el tercer país productor mundial con un 15,2%, por detrás de Italia (18,8%) y Francia (16,6%). Sin embargo, lidera las exportaciones mundiales de vino con el 19,6% del total y se sitúan por delante de Italia, con un 18,3%, y Francia, con un 13,1%, aunque cae en tercer lugar en cuanto a valor.
Respecto al enoturismo, el gasto medio diario del enoturista es de 160,2 euros por persona y día, lo que supone un 14% superior a los 146 euros de gasto medio diario por turista extranjero que el Instituto Nacional de Estadística (INE) recoge en su Encuesta de Gasto Turístico correspondiente a 2018.
De los mencionados 160,2 euros por persona y día, 41,81 euros se destinan a restaurantes y bares, 36,19 euros al alojamiento y 32,45 euros a compras de vino. Las visitas a bodegas y a museos suman 30,81 euros, destinándose el resto a regalos y otros conceptos.