El fiscal general del Estado, protegido por un estatus especial, rechaza dimitir y defiende su inocencia

La decisión del magistrado del Tribunal Supremo de procesar al fiscal general del Estado ha levantado un avispero en el ya tensionado ambiente político. El Gobierno defiende su inocencia y los populares exigen su dimisión y apuntan "al que le daba indicaciones" en referencia a Pedro Sánchez. El estatus de protección especial mantiene a salvo a Álvaro García Ortiz, que por el momento ya ha anunciado que no piensa dimitir. La información en vídeo del periodista Julio Muley.

Es la primera vez en historia que un fiscal general del Estado es procesado. El magistrado Ángel Hurtado ve indicios de que el fiscal general facilitó a un medio de comunicación el contenido confidencial de un correo, de 2 de febrero de 2024, en el que el abogado de Alberto González Amador, novio de la presidenta madrileña, admitía al fiscal la comisión de dos delitos fiscales en su nombre. A las puertas del banquillo también está la fiscal jefe provincial de Madrid, Pilar Rodríguez, por el mismo delito.

Álvaro García Ortiz defiende su actuación y rechaza dimitir

Álvaro García Ortiz no es un fiscal más, si lo fuera ya estaría suspendido de empleo y sueldo, porque así lo dicta el estatuto fiscal ante un auto de procesamiento. Pero al ser el fiscal general tiene una protección especial y puede decidir por sí mismo. Y ha decidido quedarse.

El fiscal general se ha reafirmado en su compromiso de continuar defendiendo la actuación y la integridad de la institución que representa al frente de la misma, aunque es previsible que la presión sobre su figura aumentará conforme pasen los días.

Además, las fuentes dejan claro que García Ortiz reitera su inocencia sobre los hechos que le atribuye el magistrado del Supremo.